Evoluciona satisfactoriamente joven que recibió dos pulmones y un corazón nuevos

Foto: Fotos: Javier Agudelo / EL TIEMPO

David Jiménez está aislado en una habitación, pero ya está consciente, habla y pide cosas.

Han pasado cinco días desde que David Jiménez Castañeda, de 15 años, recibió un trasplante de corazón y pulmones en la Clínica Cardiovascular Congregación Mariana, de Medellín.

Y si bien tanto su familia como el cuerpo médico que llevó a cabo esta intervención, única en el país, piensan que es muy pronto para cantar victoria, ya puede decirse que fue exitosa.

"Como tiene las defensas bajitas, para que su cuerpo no rechace el trasplante, está aislado; está consciente y ya habla y pide cosas. Confío mucho en los médicos, pero también estamos rogándole a Dios que lo ayude a pasar esta etapa que es crítica", dice Rosalba Castañeda, mamá de David.

Recuerda que su hijo estaba ilusionado con la operación, "para él era ese trasplante o seguir como hasta ahora, alejado de las cosas que cualquier niño y adolescente quiere hacer, estar con amigos, ir a estudiar, salir, montar en bicicleta, jugar fútbol, nadar, vivir... La mayor parte de su vida la ha pasado limitado y encerrado", dice.

El cirujano cardiovascular Juan Camilo Jaramillo, director del equipo de veinte especialistas que intervino a David, dice que sus posibilidades de vida más allá de unos meses eran bajas y tenía una pobre calidad de vida, "era dependiente de oxígeno y hasta las actividades de cuidado diario, como lavarse los dientes, tenían que ser apoyadas por su familia".

De acuerdo con el especialista, el adolescente sufría hipertensión pulmonar: esto quiere decir que las arterias del pulmón son muy estrechas y dificultan el paso de la sangre por este órgano, razón por la cual no se oxigenaba. Jaramillo explica que a esta condición llegó debido a que las comunicaciones entre su corazón izquierdo y su corazón derecho nunca se cerraron, "esto hacía que aumentara el flujo de sangre al pulmón, donde se represaba, en lugar de oxigenarse".

'Prácticamente desahuciado'

Cuando David tenía 2 años un médico les dijo a sus papás que tenía un daño en el corazón que debía corregirse con cirugía; solo dos años después la familia pudo viajar a Bogotá a consultar el problema en la Clínica Shaio: "Después de hacerle muchas pruebas los especialistas me dijeron que los pulmones ya estaban perjudicados, que la única salida era arreglarle el corazoncito y cambiarle los pulmones. Como eso no lo hacían en esa época, prácticamente lo desahuciaron. Me dijeron que me lo llevara para la casa, que siguiera el tratamiento indicado y que esperara a que la ciencia avanzara. No se podía hacer más".

La Clínica Cardiovascular venía tratando a David desde hacía varios años; hace cerca de dos meses lo incluyeron en la lista de candidatos al trasplante. El sábado a las 11:30 de la mañana Rosalba recibió la llamada del neumólogo Alejandro Londoño, quien le dio la noticia de que había aparecido un donante.

Era un hombre de 32 años que, a causa de una herida de arma de fuego, presentaba muerte cerebral. Estaba en el hospital San Vicente de Paúl.

"Yo estaba en shock, supernerviosa, lloraba. No podía ni hablarle al niño. Él fue el que me dijo que me calmara, que no me preocupara porque todo iba a salir bien", cuenta Rosalba.
El procedimiento -para el que la clínica se preparó durante diez años- empezó a las 2 de la tarde de ese día y terminó seis horas después. La evolución ha sido satisfactoria: "Está reaccionando bien, ya respira por solo (está extubado) y habla. Lo primero que dijo es que tenía hambre", dice Jaramillo.

Para David viene un periodo crítico de un mes durante el cual deberá permanecer hospitalizado y bajo estricta vigilancia médica.
Una vez superada esta etapa empezará un proceso de rehabilitación, paralelo a los controles médicos, que son de por vida.

Este es el segundo procedimiento de este tipo que la Cardiovascular lleva a cabo; el primero fue hace 20 años, pero no fue exitoso. Estos se suman a los 274 trasplantes de corazón y a los 47 de pulmón que dicha institución ha practicado.
En la lista de candidatos a este trasplante ya hay tres personas más.

Un trasplante poco común

El primer trasplante exitoso de corazón pulmón se hizo en 1981 en la Universidad de Stanford (Estados Unidos).

El año pasado en ese país se practicaron 19 procedimientos de esta clase.

En América Latina solo Argentina y Brasil tienen experiencias similares.

En Colombia, además de los casos de la Cardiovascular, hubo un intento no exitoso en la Fundación Valle de Lili.

Del total de los pacientes, cerca del 80 por ciento sobrevive al año del trasplante, alrededor del 45 por ciento remonta los cinco años y menos del 5 por ciento requiere ser retrasplantado.

El 15 por ciento de los candidatos al procedimiento muere esperando un donante.

ASESORÍA: HÉCTOR PULIDO, DIRECTOR DE TRASPLANTES DEL HOSPITAL CARDIOVASCULAR DEL NIÑO (CUNDINAMARCA).

CARLOS FRANCISCO FERNÁNDEZ

SONIA PERILLA SANTAMARÍA

REDACCIÓN SALUD