Los riesgos frente a un
problema de peso
Redacción de El País
Promoción. Diferentes campañas publicitarias
han girado en torno a la bulimia y la anorexia. La preocupación compulsiva por
una figura delgada, altera las conductas.
Archivo / El País
Inducirse el vómito es más común de
lo que se cree. Mujeres jóvenes, las más afectadas.
El caso de Martha Isabel Restrepo, la joven antioqueña de 21 años de edad que
se tragó el pasado viernes un cepillo de dientes de 15 centímetros cuando
intentaba inducirse el vómito, deja en evidencia que trastornos alimenticios
como la bulimia, aún continúan generando un alto riesgo en la población,
especialmente la más joven.
Como de costumbre, ese día Martha, oriunda de Jericó en Antioquia, llegó a su
casa, ubicada en la vereda Altamira de ese mismo municipio, del almacén donde
trabaja como vendedora de zapatos. Se sentó a comer y luego se dirigió al baño
para cepillarse.
Pero en lugar de usar el cepillo para el aseo dental, la joven intentó
utilizarlo para inducir el vómito. Y en un descuido, según le relató al
personal médico que la atendió en Ciudad Bolívar, suroeste de Antioquia, se
tragó el artefacto.
Por fortuna para la joven, los médicos lograron extraerle el cepillo sin
mayores complicaciones, a través de una endoscopia, gracias a la “obra
milagrosa de Dios”, según palabras de una de sus parientes.
Pero las preocupaciones para los familiares de Martha Isabel no han cesado pues
si bien ella se tragó el cepillo por accidente, lo hizo mientras intentaba
provocarse el vómito, acción derivada por un trastorno nutricional que debe ser
tratado.
“Muchas veces cuando las pacientes buscan inducirse el vómito, utilizan objetos
que sean un poco más largos, pero a veces en el momento de vomitar, el cuerpo
hace el proceso de deglución y el objeto puede ser ingerido”, explicó la
psicóloga, especialista en trastornos alimenticios, Camila Pombo.
William Valencia, uno de los médicos del Hospital Universitario San Vicente de Paul de Medellín, donde se le practicó la endoscopia a la
joven, aseguró que “es muy raro que un paciente normal se trague un cepillo y
es muy probable que esto ocurra sólo en pacientes bulímicos o anoréxicos”.
Agregó que de haber transcurrido más tiempo, a la joven se le habría
comprometido seriamente su intestino, estómago y demás vías digestivas.
Para Sonia Bersh, médico psiquiatra y quien coordina
el programa de Trastornos de Conducta Alimentaria de
la clínica Valle del Lili de Cali, “en este tipo de
situaciones por lo general hay mucha negación de la enfermedad, porque la
persona sabe que tiene un problema, pero siente mucha vergüenza de decirlo y
convive con él durante un largo tiempo sin que nadie lo sepa”.
De ello puede dar fe Mayerly, hermana de Martha
Isabel, quien revela que ella, “aunque es la niña consentida de todos porque es
muy bonita y alegre, sí venía últimamente con mucho desorden en las comidas,
tomando hasta 30 vasos de agua en el día y comiendo poco, pero cosas que no la
nutrían”.
Los especialistas advierten que las mujeres adolescentes entre los 18 y 25 años
son las más vulnerables para padecer este tipo de trastornos alimenticios.
Pero los hombres no se quedan atrás. Según datos proporcionados por la
psiquiatra Sonia Bersh, uno de cada diez casos de
bulimia, corresponde a hombres adolescentes.
En lo corrido del año, Patricia Alfaro, nutricionista y dietista del Centro
Médico Imbanaco, ha atendido en su consultorio a dos
hombres con desórdenes alimenticios, y a tres mujeres que debieron ser
hospitalizadas. Y cada mes recibe un caso nuevo.
“La bulimia es una enfermedad que se desarrolla por un trastorno psicológico y
emocional que se desencadena por un fuerte desorden fisiológico. y como tal debe ser tratado a tiempo”, reiteró la
nutricionista.
Por su parte, el secretario de Salud Municipal, Alejandro Varela, afirmó que
“en la medida en que tengamos un patrón alimenticio saludable, se minimizan
estos riesgos”.
· "El lunes
fuimos a misa para darle gracias a Dios, porque esto fue un milagro. Mi hermana
ahora está tranquila, pero muy lastimada”. Sandra Restrepo, hermana de la
joven.
· Como éste en todos los casos se requiere de
ayuda profesional y comprensión, en lugar de estigmatización, porque cualquier
persona puede ser bulímica”. Sonia Bersh, psquiatra.
Recomendaciones
Para evitar estos riesgos ante la auto provocación del
vómito, los especialistas recomiendan promover campañas de regímenes
nutricionales adecuados, desde la edad escolar.
Es importante velar por la estabilidad emocional al interior de las familias.
Está claro que cuando aparece la ansiedad y la depresión, el joven busca
calmarse a través de la comida.
Para bajar de peso no se necesita dejar de comer, sino realizar un plan
nutricional guiado por expertos.