El pelo y las uñas pueden ser el reflejo de algunas enfermedades internas

El mal estado del pelo o de las uñas puede ser indicador de otro tipo de problemas más serios en la salud de las personas.

Salvio Serrano Ortega, presidente del Grupo Español de Tricología y médico especialista en Dermatología de la Universidad de Granada (España) explica esta relación,

El presidente del Grupo Español recurre al paralelismo que le da un refrán: "Por el humo se sabe dónde está el fuego" para describir la relación entre el pelo y las uñas en mal estado con algunas enfermedades.

Advierte que aunque el pelo y las uñas tienen capacidad de enfermar por sí solos, a causa de agresiones externas e infecciones, la mayoría de las veces estos signos son reflejo de enfermedades internas.

"Es más -dice-, la sintomatología capilar y ungueal pueden acompañar o preceder a otros síntomas de la enfermedad. Por ello insistimos tanto en que el médico conozca estos signos y síntomas para poder establecer diagnósticos precoces de determinadas patologías".

La lista de enfermedades de las uñas es larga: más de medio centenar están catalogadas por los especialistas. Desde la acrodisostosis (uñas de las manos cortas, ovaladas o anchas) hasta la uña ectópica (la que crece en los tejidos adyacentes de la uña).

Aunque, en general, las afecciones de las uñas no suelen ser graves, en determinados casos provocan infecciones y requieren intervención quirúrgica, como la paroniquia.

Las personas con una curvatura exagerada de la uña, conocida también como "de vidrio de reloj", suelen presentar problemas cardiovasculares congénitos, pulmonares crónicos, y también endocarditis bacterianas.

Calvicie y corazón

Serrano Ortega aseguró, durante la celebración en Logroño (España) del XXI Congreso Nacional de Dermatología, que está científicamente probada la relación entre personas con alopecia androgenética (AGA) y un riesgo mayor de padecer algunas enfermedades. 

Serrano Ortega dice que, recientemente, él y su grupo de trabajo han confirmado hipótesis en ese sentido.

Según el especialista, los estudios han demostrado que tanto en el hombre como en la mujer, la aparición de AGA antes de los 36 años es un factor de riesgo de sufrir precozmente males coronarios.

La pérdida precoz de cabello en ellos también se ha relacionado con un mayor riesgo resistencia a la insulina, mientras que la aparición tardía de ese síntoma se asocia con una mayor posibilidad de sufrir hipertensión y diabetes.

Por último, hay una relación notable entre la hiperplasia benigna de próstata y la pérdida precoz de cabello y también con el cáncer de la misma glándula, pero no con la pérdida frontal de pelo sino con el de la coronilla.

Serrano Ortega considera que la génesis de estas asociaciones está en que muchas de las enfermedades descritas comparten algunos mecanismos etiológicos.

"Por ejemplo, se sabe que la alopecia androgenética del varón se produce por una mayor actividad de la 5 alfa reductasa, enzima que convierte la testosterona en dihidrotestosterona y lo mismo sucede en la hipertrofia benigna de la próstata".

EFE REPORTAJES