Debate por caso de niño español que pesa 70 kilos

Luis Montoya y Margarita Gabarres, padres del menor.

La noticia causa alarma en un país donde el 27 por ciento de los infantes padece sobrepeso u obesidad.

La justicia española ordenó retirarle la custodia a los padres del niño de 9 años, cuyo peso alcanzó los 70 kilos. "Deja de comer porque te van a quitar a tus padres" es un comentario que ha empezado a usarse entre escolares para referirse a aquellos niños con sobrepeso.

Así lo relata la profesora de Psicología de la Universidad Complutense de Madrid, María Isabel Casado, quien considera que la judicialización de la obesidad infantil "da pistas de la gravedad del problema".

Un problema que ha cobrado actualidad a raíz del caso del menor cuya custodia paterna ha sido retirada por un juzgado de la ciudad de Ourense, en la región de Galicia (norte).

Desde 2005, el Gobierno regional de Galicia, el servicio de pediatría de un hospital de Ourense y el Ayuntamiento de esa ciudad vigilan la situación del menor afectado de obesidad mórbida y que llegó a pesar hasta 81 kilos.

Los padres, Luis Montoya y Margarita Gabarres, que se niegan a entregar al niño, se han enfrentado a la Administración gallega y al sistema judicial, tras la interposición de una querella criminal.

"La Administración, más que retirar al niño de su entorno familiar, debe limitarse a colaborar con los padres y ofrecerles los medios para corregir la situación", asegura la presidenta del Consejo Español de Abogados Jóvenes, Mayte Cruz, que ejerce en Ourense.

Separar al menor es un mecanismo "muy agresivo" para el desarrollo del niño y un grave riesgo psicológico, opina.

La Policía continúa la búsqueda del niño, que ha sido trasladado a un lugar desconocido por decisión de los padres y que podría estar en casa de algunos familiares.

"El nivel de preocupación por la obesidad infantil es máximo", asevera el presidente de la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (Aesan), Roberto Sabrido, quien recuerda que la OMS la califica como la "primera pandemia no infecciosa del siglo XXI".

Es la segunda causa de muerte prevenible tras el tabaco y, además de originar otras patologías como la diabetes tipo 2, es un problema social porque el gasto sanitario derivado de su tratamiento representa entre el 5 y el 7 por ciento del total, añade Sabrido.

Actuar desde la infancia mediante una buena educación alimentaria por parte de los padres y la escuela es esencial porque el 80 por ciento de los niños obesos termina siéndolo de adulto.

Las causas del sobrepeso infantil son las mismas que en los adultos: el sedentarismo y la alimentación.

Los niños de hoy -denuncia la psicóloga María Isabel Casado- no juegan en la calle y han cambiado el salto con cuerda o el balón por los videojuegos y el computador, reduciendo su gasto calórico.

Además, varias generaciones están creciendo con pizzas o productos preparados en hogares donde no hay tiempo para cocinar y las comidas han dejado de ser "un acto para hablar y compartir juntos en familia".

El abandono de la dieta mediterránea por otra más rica en grasas y azúcares es también responsable de la obesidad: "la tenemos pero no la usamos", apuntan los expertos, que concluyen que "lo lógico es que en una década logremos revertir la tendencia y empiece a disminuir" la obesidad infantil.

MADRID (Efe)