Niños y adultos jóvenes sanos, principales víctimas de gripa A, afirma estudio

La obesidad, la diabetes y el embarazo son, de acuerdo con la OMS, condiciones comunes a muchos de los afectados por este mal.

Un análisis del Instituto Nacional de Salud señala que en el país la mayoría de los afectados, además, son mujeres. Tos fue el síntoma común a todos los fallecidos.

De los 23 fallecidos por la nueva influenza en Colombia, 15 eran mujeres y dos de ellas estaban embarazadas; la edad promedio de las víctimas era 27 años y ninguna adquirió el virus AH1N1 fuera del país.

Desde el momento en que sintieron los primeros síntomas hasta que se vieron en la necesidad de consultar, no pasaron más de tres días.

Estos datos, que se desprenden del análisis que el Instituto Nacional de Salud (INS) hizo de las características de las muertes que oficialmente deja hasta ahora la gripa A en el país, coinciden con el último reporte de la Organización Mundial de la Salud.

Según el organismo, cuatro de cada diez enfermos graves por la nueva influenza son niños y adultos jóvenes sanos.

Juan Gonzalo López, director del INS, dijo que "encontramos que los fallecidos eran, en general, personas en buen estado de salud, pero que tenían algunas condiciones en común, como la obesidad, la diabetes y el embarazo, que desde el plano epidemiológico podrían convertirse en factores de riesgo".

El análisis hecho por el Instituto determinó, además, que el ciento por ciento de los afectados por el virus tuvieron tos y dificultad para respirar; la fiebre, considerada un síntoma vital para consultar, no se presentó en todos los casos.

Desde que se confirmó el primer caso de la enfermedad en Colombia, el 2 de mayo pasado, a la fecha, se han reportado al INS 14.856 alertas. De ese total, 3.587 llegaron con muestra para análisis; de ese grupo se confirmaron los 367 casos reportados a la fecha.

López aclaró que estos no constituyen todos los casos de la enfermedad en el país; no todos se reportan, pues la gente los confunde con una gripa común. Para la muestra está que la mayoría de los casos que llegaron al laboratorio con una alta sospecha, fueron descartados.

Los más afectados, dice el Instituto, están entre los 25 y los 29 años, seguidos de cerca por la población entre los 15 y los 19 años. Del total de confirmados sólo 119 requirieron hospitalización.

López aclara que aunque hay datos consolidados que indicarían una tendencia, por ahora es imposible saber qué rumbo tomará el virus.

Margaret Chan, directora de la OMS, pidió ayer a los gobiernos estar preparados para enfrentar una segunda oleada de nueva influenza, "el virus nos puede deparar cualquier sorpresa, como una mutación constante e imprevisible; como ocurrió en las anteriores pandemias, incluso es probable una tercera oleada".

El hecho de que el AH1N1 infecte a personas relativamente sanas, y en menos de dos días las lleve a desarrollar neumonías que no responden a tratamientos, destruyen los tejidos pulmonares en horas y causa complicaciones en el corazón, los riñones y el hígado que llevan a la muerte, habla muy mal del virus. En otras palabras, "no podemos decir que ya pasó lo peor o que está a punto de pasar", dijo Chan.

De allí el afán con el que algunos gobiernos han invertido ya cifras multimillonarias en la reserva de las proyectadas vacunas.

López es claro en decir que no habrá vacunas para todos, por lo que es necesario priorizar los grupos que se beneficiarán, "esa es una de las decisiones más difíciles que enfrentarán los gobiernos; por eso no hay que bajar la guardia con las medidas sanitarias para evitar el contagio y la diseminación del virus".

La gripa común, muy lesiva

Se estima que cada año en Colombia resultan afectadas por la gripa común cerca de 6,5 millones de personas, una enfermedad cuyos síntomas son similares a los de la nueva influenza.

Aunque las autoridades de salud afirman que todavía es muy temprano para saber qué camino cogerá la nueva influenza en el mundo, su morbilidad y mortalidad están lejos de parecerse siquiera a las que dejan la gripa estacional y otras infecciones respiratorias.

Se estima que en el mundo cerca de 600 mil personas fallecen cada año por complicaciones de la influenza estacional, 37.000 de ellas en Estados Unidos. En Colombia, de acuerdo con el Instituto Nacional de Salud, fallecen 6.418 personas por infecciones respiratorias agudas cada año; de ese total, 4.038 son mayores de 65 años y 762 menores de un año.

Por esa razón Iván Guillermo Stand Niño, presidente de la Asociación Colombiana de Neumología Pediátrica, asegura que "uno de los beneficios de toda la difusión que se ha dado a la nueva influenza es que ha permitido educar a la comunidad sobre las medidas de prevención y manejo inicial de todas la infecciones respiratorias".

Contacto con otros virus protegería a los más viejos

En general, los llamados virus de la influenza estacional afectan más a menores de 5 años, a mayores de 60 años y a personas inmunológicamente comprometidas (enfermas de cáncer, sida, con desnutrición y quienes han sido sometidos a un trasplante, entre otras).

Por eso preocupa la confirmación, por parte de la OMS, de que la nueva influenza ataque y mate, principalmente, a adultos jóvenes relativamente sanos.

En la literatura médica existen antecedentes: en 1977 un tipo de virus H1N1, causante de la llamada 'gripa rusa', afectaba a menores de 25 años en tasas mucho más altas que a personas mayores, que habían estado expuestas al mismo virus dos décadas atrás.

Lo ocurrido con la 'gripa rusa' cobró relevancia ante el curso seguido por la actual pandemia. Leonard Mermel, especialista en enfermedades infecciosas del Hospital de Rhode Island, sugirió que el actual virus de la gripa podría ser similar a la cepa de la década de los 70, lo que haría que los mayores de 40 años estén a salvo del nuevo virus.

"Podría ser que el H1N1 tenga bastante similitud antigénica con las cepas de influenza H1N1 de esos años; eso pudo producir una inmunidad que les serviría para atenuar los efectos del AH1N1", dijo Mermel en una carta enviada a la revista The Lancet.

Eso explicaría por qué los jóvenes parecen ser más susceptibles a la nueva influenza que sus padres y sus abuelos.

En general, la gripa estacional afecta más a personas en edad avanzada, que por lo general no son sinónimo de buena salud.

Larry Madoff, editor del servicio de noticias epidemiológicas ProMED Mail, un programa de la Sociedad Internacional de Enfermedades Infecciosas, dijo en su momento que la hipótesis de Mermel es plausible, pero se requiere más investigación.

CARLOS F. FERNÁNDEZ
SONIA PERILLA S.
REDACCIÓN SALUD
CON INFORMACIÓN DE EFE Y AFP
FUENTE: ADAPTADO DE 'WIRED SCIENCE', 'OLD PEOPLE MAY BE IMMUNE TO SWINE FLU'.