REDACCIÓN JUSTICIA El caso de Karol, una niña de
13 años que era maltratada por su madre y había sido dejada en manos del
Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (Icbf), en
el Castillo (Meta), llevó a la Corte Constitucional a exigirle
a los jueces y a dicha entidad ser más rigurosos con el seguimiento de estos
casos.
La niña tuvo que recurrir en repetidas oportunidades a sus vecinos para que
la defendieran del abuso de su progenitora, quienes intervinieron sin tener
resultados. Como última medida, el párroco del pueblo y una sicóloga de la
Secretaría de Salud representaron a la pequeña, por solicitud de ella misma,
para interponer una acción de tutela.
Según la menor, a pesar de sus ruegos, el Icbf no
había querido separarla de su mamá de manera definitiva a pesar de haber
comprobado la violencia con la que la trataba.
“Yo quiero irme para un internado, cualquier internado, quiero estudiar
realizar mis sueños, ser bióloga marina”, le dijo Karol
al sacerdote y a la funcionaria. La menor les contó a ambos que había acudido a
ellos pues su madre había llegado al extremo de amenazarla con un cuchillo.
Después de analizar la tutela, la Corte les ordenó al Icbf
y al juez promiscuo de esa población del Meta supervisar el cuidado que le
están brindando a Karol y verificar en qué situación
se encuentran sus tres hermanos menores, que aún continúan bajo la custodia de
la madre.
No era la primera vez que Karol pedía este favor a
personas mayores. Meses atrás unos vecinos le habían ayudado a instaurar otra
tutela luego de ser testigos de que la madre la obligaba a realizar todos los
oficios domésticos y a cuidar de sus hermanos.
En ese momento, la niña relató a los jueces que ella y sus hermanitos habían
tenido que presenciar actos sexuales de su madre con varios hombres.
Por eso, la Corte también hace un llamado para que se tengan en cuenta las
denuncias de terceros, en este caso, los vecinos de Karol.
La niña se encuentra actualmente en un hogar sustituto.
El caso fue asumido inicialmente por el juez promiscuo de El Castillo, que
lo remitió a un juez del circuito de Granada (Meta). Este, a su vez, determinó
que el hecho denunciado en la tutela se había superado al establecer que Karol permanecía en el hogar sustituto. Sin embargo, la
niña había sido devuelta a la madre.
Que supervise el cuidado, la atención y la formación brinda- dos a Karol dentro de su hogar sustituto y para que realice un
seguimiento en el hogar de su madre”.
El llamado que le hace la Corte al Icbf para
evitar casos de maltrato