Un mensaje de urgencia entregaron ayer los departamentos al Gobierno
nacional y al Congreso: los recursos que tienen para atender a la población que
está por fuera de los regímenes contributivo y subsidiado en salud empezarán a
agotarse entre julio y agosto, y no tienen más fuentes de ingresos.
La situación fue analizada en una reunión con representantes de los
ministerios de Hacienda y de la Protección Social y los congresistas de las
comisiones económicas, en la que acordaron enviar un mensaje de urgencia para
el proyecto de juegos de suerte y azar, y que no ha tenido ningún avance en el
Legislativo.
Con esa iniciativa, el Gobierno espera subsanar en parte la problemática de
los departamentos con la atención de los usuarios del denominado No POS.
Según lo explicó el representante Ángel Custodio Cabrera, se acordó incluir
en el proyecto que las regalías de las loterías para la salud vayan
directamente a las secretarías a la Gobernación, para que no pasen por terceras
manos.
Igualmente, se autoriza para que los departamentos empiecen a generar el
loto y que este sea un juego administrado directamente por las gobernaciones.
Para cerrarle el paso a la evasión, se incluirá que a la hora de encontrar
un juego de maquinitas o tragamonedas funcionando de manera ilegal, no se
cierre el establecimiento, sino que se decomise el aparato.
Además, se está pensando en cobrarles impuestos a las rifas que hacen los
bomberos, porque se ha detectado que, a través de ellos, se hacen toda clase de
sorteos, incluso, de entidades diferentes.
En la reunión se acordó igualmente excluir la creación de una lotería
nacional, iniciativa que tiene resistencia en los departamentos grandes.
“Sin embargo, vamos a plantear que quede la posibilidad de que los
departamentos que quieran asociarse en una lotería nacional lo hagan”, dijo
Cabrera.
En cuanto a la reforma tributaria territorial, que es de interés para los
departamentos, porque aumenta las tarifas al impuesto de vehículos y al consumo
de cigarrillos y reglamenta el cobro del alumbrado público, entre otros, quedó
claro que no tiene buen ambiente en el Congreso, más en una época electoral.
Los principales afectados con la falta de recursos de los departamentos
serían las personas que no están en ningún régimen de salud.