A la consulta de los urólogos llegan, cada vez con mayor frecuencia, hombres
en sus 40, confundidos por la naturaleza de los exámenes para detectar el
cáncer de próstata.
Muchos sienten recelo por estas pruebas e incluso traen dudas sobre su
efectividad y el momento en el que deben practicárselas. Casi todos preguntan
si el examen de sangre reemplaza el tacto rectal para analizar la próstata.
Estas son algunas de las inquietudes más comunes: ¿Qué es el tacto rectal?
Es un examen clínico que se hace para identificar posibles signos de cáncer de
próstata. Si se palpa dura o con nódulos fijos, la sospecha es alta; en estos
casos siempre se ordena una biopsia para confirmar el diagnóstico.
¿Toda próstata agrandada tiene cáncer? No. Algunas inflamaciones crónicas,
generalmente causadas por infecciones, también pueden agrandarla y endurecerla.
Por el contrario, las infecciones agudas la ponen más blanda.
¿A qué edad debe hacerse? No es un examen para todos los señores. Se indica
en mayores de 50 años.
¿No era a los 40 años? Se recomienda a esta edad cuando los hombres tienen
antecedentes de este cáncer en padres, tíos o hermanos, y cuando son afrodescendientes (su prevalencia
es más alta).
¿Y el examen de sangre? Este mide el antígeno prostático (PSA), una enzima
producida por la próstata que le da la consistencia al semen. Cuando la
glándula se daña (por males como el cáncer), esta enzima pasa a la sangre.
Si sale en la sangre, ¿es porque hay cáncer? No siempre, pues su presencia
puede obedecer a otras enfermedades. Sin embargo, entre más altos sean sus
valores, mayor es la probabilidad de cáncer. Para llegar al diagnóstico
definitivo son indispensables el tacto rectal y la práctica de una biopsia.
¿Qué otros males elevan los niveles de PSA? Los más comunes son el
crecimiento benigno de la próstata, que puede ocurrir con la edad, y las
infecciones conocidas como prostatitis.
Si los valores de PSA son negativos o muy bajitos, ¿se puede estar
tranquilo? No del todo. En dos de cada 100 hombres la prueba puede no reconocer
un cáncer que sí existe y en el 5 por ciento puede, por el contrario, sugerir
la presencia de la enfermedad,pese
a no tenerla. Por eso hay que hacer las otras pruebas.
¿Entonces el examen de sangre no reemplaza el tacto? No. Son
complementarios.
¿Cuándo debe practicarse el examen de sangre? Es ideal que sea simultáneo al
primer tacto rectal; en cuanto a la periodicidad, esto lo determina el
especialista a partir de las cifras iniciales.
Se dice que el examen de sangre no es tan efectivo...
Al identificar una proteína en la sangre este examen permite encender las
alarmas ante el riesgo de cáncer. El debate se da por lo que sigue al
diagnóstico de este mal (ver recuadro).
(*) URÓLOGO, HOSPITAL UNIVERSITARIO SAN IGNACIO, UNIVERSIDAD JAVERIANA .
¿Por qué tanto debate? Hace una semana el New England Journal of Medicine publicó dos estudios iniciados a fines de los
90, diseñados para determinar si el PSA ayuda a reducir la mortalidad por
cáncer de próstata.
Los científicos concluyeron que esta prueba salva pocas vidas, al tiempo que
puede llevar a que se someta a muchos pacientes a tratamientos innecesarios.
El centro de la discusión es que existen diferentes tipos de cáncer de próstata:
unos que crecen muy despacio y, probablemente, nunca van a causar la muerte del
afectado; también hay otros que pueden avanzar muy rápido y acabar con su vida,
incluso si se detectan en forma temprana.
El problema es que aún no hay métodos para determinar con exactitud ante
cuál de los dos tipos de tumores se está.
Por eso todos son tratados de manera agresiva. En ese grupo pueden caer
algunos cuya salud se afecta por tratamientos innecesarios. Los expertos
recomiendan que cada médico decida la mejor opción para su paciente, a partir
de sus características.
2.277.
hombres mueren en Colombia cada año por cáncer de
próstata, de acuerdo con el Instituto Nacional de Cancerología