Comportamiento Humano
La discriminación mata
Noviembre 01 de 2009

Carlos E. Climent

“La violencia sexual contra la mujer no es un asunto de libido, es misoginia, o sea odio hacia el sexo femenino”.

“En los últimos 50 años han muerto asesinadas más niñas por el solo hecho de pertenecer al sexo femenino, que hombres murieron en todas las guerras del Siglo XX”.

“La infibulación, o sea la amputación del clítoris, los labios mayores y menores con el propósito de disminuir el placer sexual femenino, ocurre en el mundo cada 10 segundos. En la actualidad hay 130 millones de niñas que han sido mutiladas por ese procedimiento”.

“Se calcula que hay actualmente unas 27 millones de niñas, incluso menores de 10 años, que son obligadas a ejercer la prostitución, muchas veces vendidas a los explotadores...por sus propios padres”.

“El tráfico sexual de mujeres, especialmente de niñas, es la esclavitud moderna que en números absolutos supera a la que se realizó a través del Atlántico en los Siglos XVIII y XIX”.

“En muchas naciones subdesarrolladas las madres tienden a llevar a vacunación con menor frecuencia a las hijas que a los hijos, por simple discriminación de género. Este solo hecho es responsable del 20% de las mujeres faltantes en esos países”.

“Cada minuto muere una mujer en el mundo en el proceso del parto”.

“Las mujeres entre 15 y 45 años tienen más posibilidades de morir por la violencia masculina que por la guerra, el cáncer, la malaria y los accidentes de tránsito”.

Los anteriores son apenas unos pocos ejemplos contenidos en un revelador documento (1) que describe los casos de las niñas que convirtieron “la opresión en oportunidad”.

La mayoría de los casos descritos provienen de primitivas regiones del Asia o del África.

Pero la discriminación contra la mujer no es exclusiva de esas regiones del mundo. Las estadísticas de maltrato y prostitución infantil y el machismo que impera, por ejemplo en Colombia y otros países supuestamente más civilizados, daría para escribir muchos libros.

A manera de conclusión es importante recordar que:

*El instrumento más poderoso para reversar la injusticia que se comete contra la mujer, es la educación.

*Enseñarle a una mujer a rebelarse y hablar su verdad le dará el poder para escapar de los burdeles y de cualquier otra forma de opresión.

*Las soluciones son diversas y dependen de las circunstancias pero en especial de la sensibilidad, generosidad y voluntad de cada cual.

*No son los gobiernos los que hacen la diferencia. Son las acciones individuales las que suman.

*Es fundamental, por ejemplo, dar a las niñas las mismas oportunidades y consideraciones que se da a los varones. Esto debe realizarse desde muy temprana edad y en todas las circunstancias de la vida cotidiana.

*Cada voz que se haga escuchar, cada paso que se dé a favor de la igualdad y cada una de las contribuciones que cada persona haga a favor de esta causa, puede llegar a convertirse en una luz de esperanza para los millones de niñas que en todas las regiones del mundo, y en pleno Siglo XXI, siguen siendo discriminadas, maltratadas, violadas o eliminadas.

(1) Kristof, N. and Wudunn, S., Half the sky, Alfred A. Knopf, N.Y. 2009

carloscliment@elpais.com.co