Virus de la rabia sigue acechando a caleños

Nueve personas, en promedio, fueron mordidas cada día en Cali por un animal y corrieron el riesgo de contagiarse con el virus de la rabia.

El manejo irresponsable de mascotas es la principal causa de estos accidentes. Así lo informó el Centro de Zoonosis de Cali durante la conmemoración del Día Internacional de Lucha contra la Rabia.

Según la dependencia, de los 2.285 casos reportados en lo que va del año, 1.956 corresponde a mordeduras de perros; 285 de gatos; 18 de primates; 16 de murciélagos; y 10 entre equinos, cerdos y nutrias. Aunque cada año son registradas unas 2.500 mordeduras, en Cali no se presenta desde hace 22 años ningún caso de contagio de rabia.

Ayer, en las instalaciones del centro fueron vacunados, desparasitados y examinados centenares de perros y gatos. También se otorgaron 80 cupos para esterilizar animales.

Wilmer Caicedo, director del Centro de Zoonosis de la Secretaría de Salud, insistió durante la jornada en la tenencia responsable de mascotas. Dijo que ésta no consiste únicamente en sacar el perro a la calle con cadena.

“Se trata de ponerles bozal cuando la raza lo amerite, recoger los excrementos, aplicarles debidamente las vacunas y controlar su población”, agregó Caicedo.

Informó que en Cali hay un promedio de 130.000 perros y gatos y de ellos, 15.000 son catalogados como callejeros. “Mucha gente tiene un animal y cree que porque le da comida ya está siendo responsable. El problema es que los echan a la calle desde las 7:00 de la mañana y en esas están todo el día. Terminan siendo animales sin dueño”.

Esta situación propició que de los casos de mordedura ocurridos en los primeros ocho meses del año, solamente se lograra la investigación de 1.778 eventos, determinando el estado de los animales.

En 601 casos no se logró la ubicación de los pacientes debido a direcciones erradas o reportes incompletos.

En ese sentido, Alejandro Varela, secretario de Salud Municipal, expresó que la población caleña debe tomar conciencia de recibir atención médica en caso de agresiones por animales que potencialmente pueden ser transmisores de rabia.

“El mayor porcentaje de casos de mordeduras se presenta por imprudencias de las personas que no respetan los espacios de los animales y muchos otros porque los propietarios de las mascotas no ofrecen condiciones de seguridad”, dijo.

Uno de los casos más recordados es el ocurrido en enero pasado en el Orquideorama. Allí, cuatro personas (tres mujeres y un hombre) fueron atacados por una rottweiler. Las víctimas eran turistas.

Aunque Aydeé Amaya, una de las agredidas, no quiso instaurar ninguna acción legal en contra del parque, sí pidió más controles para proteger a los visitantes.

De otro lado, Mauricio Santafé, de la Sociedad Protectora de Animales en Colombia, anunció un convenio con el Centro de Zoonosis para establecer “métodos humanitarios en el control de población de animales”.