Por estos días es posible que algunas gestantes planeen tomar un descanso de
sus actividades cotidianas. Sin embargo, antes de subirse al avión, deben
adquirir un plan de asistencia médica que las cobije en caso de que se presente
alguna eventualidad en el vuelo.
Sandra Díaz, especialista en Medicina Aeroespacial y en Salud Ocupacional de
la Universidad Nacional de Colombia, sostiene que las complicaciones durante el
embarazo pueden presentarse en cualquier momento y es necesario asegurarse de
que en el lugar de destino se va a tener la disponibilidad para una adecuada
atención ginecoobstétrica y neonatal, por si se
presenta un parto prematuro.
“No hay que olvidar que un viaje está rodeado de circunstancias generadoras
de estrés; es más, el viaje per se, genera estrés, el
cual, indiscutiblemente, puede llevar a complicaciones como partos pretérmino”, dice Díaz.
Por su parte, el ginecoobstetra José Joaquín Gómez
señala que es de vital importancia para las mamás que van de viaje, ya sea
nacional o internacional, comprar un seguro médico, porque de presentarse
cualquier eventualidad, deben estar preparadas para evitar o hacer frente a
complicaciones que pueden ser fatales tanto para la gestante como para el feto.
Los límites Gómez recomienda viajar máximo hasta las 32 semanas de
gestación; es decir, 7 meses y una semana, y Díaz añade que si se han
presentado complicaciones de algún tipo durante la gestación, es necesario que
la mujer asista a una consulta con el médico tratante y el médico aeroespacial,
quienes evaluarán de manera idónea e individualizada la conveniencia de que la
madre haga el viaje.
Después de dicho periodo de gestación, no se recomienda que la mujer viaje,
con el fin de evitar complicaciones. Gómez destaca que las que se pueden
presentar son: amenaza de parto pretérmino
(contracciones antes de los nueve meses), ruptura de las membranas (ruptura de
la fuente), trauma obstétrico (trauma abdominal). Cualquiera de estas se pueden
desencadenar, sobre todo durante los viajes aéreos.
RECOMENDACIONES ESENCIALES .
- Usar ropa y zapatos cómodos, y medias de compresión venosa.
- Llevar maletas ligeras.
- Tener un seguro médico.
- Estar pendiente de signos de alarma (movimientos fetales, pérdida de
líquido amniótico, sangrado genital y actividad uterina).
- Tener aval del ginecólogo y del médico aeroespacial para hacer el viaje.
- Realizar cambios de posición frecuentes.
- Hidratarse antes y durante el viaje. Evitar alimentos que produzcan gases