El año pasado un empresario colombiano del sector de cosmética recordaba
cómo en la Segunda Guerra Mundial el negocio de los labiales creció porque en
tiempos difíciles a la mujer le gusta verse bien.
Y en el 2009, en plena crisis económica, el negocio ‘pintó’ bien para las
empresas que venden productos de belleza y cuidado personal porque cuentan con
una masa de consumidores que se esfuerzan por mejorar su apariencia física. Poco
escatiman en maquillaje, cremas, tratamientos capilares, tinturas y fragancias
(véase nota anexa).
Euromonitor International
cuantificó en 3.049 millones de dólares, unos 6 billones de pesos, el mercado
de belleza y cuidado personal en Colombia el año pasado.
Los perfumes tienen una buena tajada con 579 millones de dólares, cerca del
20 por ciento. El cuidado de la piel tiene el 14 por ciento del total, con 432
millones de dólares.
Mary Tabion, gerente de
Investigación de América Latina de Euromonitor International, explica que se puede comparar el tamaño del
mercado de belleza en Colombia con el de otros países como Polonia, Tailandia,
Argentina y Taiwán. Las potencias en esta materia son Estados Unidos, Japón,
Brasil o China.
Sobresale el interés de los hombres por estos productos. Movieron 452
millones, con un crecimiento del 42 por ciento frente al 2002.
“En Latinoamérica, Colombia es el tercer mercado en cuidado de hombres, y en
el mundo está en el lugar 14, con un tamaño de mercado similar a Canadá y
Holanda”, dice Tabión.
Al respecto, la analista señala que en el pasado sólo empresas como Gillette
y Nivea trabajaban en este segmento, pero ahora
marcas como L'Oréal, Belcorp,
Yanbal y Amway ofrecen a
los hombres más opciones. Ellos se interesan en productos que les garantice un
aroma varonil, y que les aporte al cuidado de su piel.
En general, esta categoría crece, pero en niveles más bajos comparados con
2005-2008.
Los colombianos son conscientes de la relación de precio y calidad. Por eso,
prefieren presentaciones pequeñas y promociones para ajustar las compras al
presupuesto familiar, dijo Tabion.
Para aprovechar el potencial, las empresas invierten en comercialización y
en innovación de productos. Camilo Jaramillo, director de mercadeo de Avon, explica que la venta directa o multinivel
ha contribuido a la dinámica del negocio porque acerca los productos a una
mujer que tiene el deseo y el derecho de verse bien siempre. Alfredo Morales,
de Henkel Región Andina, con marcas como Igora y Konzil, destaca que el
interés del consumidor obliga a traer al país lo que se impone en los grandes
centros de la moda.
- Preocupación por ‘mirarse al espejo’ Verse bien al mirarse al espejo es
una preocupación que tienen los colombianos. El estudio Megatrends,
de Yanhaas, lo señala cuando el 85,33 por ciento de
los encuestados dice que tienen la necesidad de mantenerse siempre bien
arreglados.
Por edades, sobresale el interés de quienes están entre los 25 y 39 años (90
por ciento) .
Ponerse en la tarea de mejorar su aspecto está en las prioridades del 70 por
ciento de los consultados. Los jóvenes de 17 a 24 se concentran más en eso,
según lo reconoció el 82 por ciento.
Además, las ganas y la búsqueda de productos y servicios para reflejar menos
años no distingue entre hombres (67,78 por ciento) y
mujeres (62,32 por ciento). En cosméticos, ellas dicen que le dedican el tiempo
necesario para comprar los que se ajuste a sus necesidades, según 57 de cada
100.
Bajar de peso las desvela más a ellas: 43 por ciento lo han intentado. En el
caso de los hombres, apenas un 16,64 por ciento. En general, más de la mitad de
las personas decide comer menos para hacerle el quite a los kilos.
Esta tendencia de reducción del peso se ve con más fuerza en las costas
Pacífica y Atlántica, con un resultado del 42,08 y 41,82 por ciento.
En cirugías estéticas, el 28,86 por ciento de las mujeres y el 8,59 por
ciento de los hombres afirmaron estar interesados en practicarse una si
tuvieran la oportunidad. El estudio fue hecho entre 1.470 personas mayores de
17 años, de 18 ciudades.