El 54 por ciento de las Unidades de Cuidado Intensivo Neonatal en Colombia presentan fallas

Los problemas que pueden sufrir los bebés por mala calidad en la atención van desde ceguera hasta parálisis cerebral.

Aunque en el país hay más de 200 Unidades de Cuidado Intensivo Neonatal –Ucin–, se estima que en el 54 por ciento de ellas, a pesar de contar con camas suficientes, talento humano y tecnología, existen fallas en la calidad de la atención de los recién nacidos.

Así lo afirma un estudio realizado por la Universidad Militar Nueva Granada (Bogotá) y la Universidad del Norte (Barranquilla), cuyos autores principales son Hernando Baquero, presidente de la Asociación Colombiana de Neonatología, y Clara Galvis, vicepresidenta de la misma.

En este se encontró que, durante el día, en el 90 por ciento de las 202 unidades encuestadas una enfermera responde por al menos 10 camas de servicio de neonatología. En la noche, en el 23 por ciento de las Ucin, esa misma enfermera está al tanto de más de 15.
“Así es difícil garantizar calidad”, recalcan los autores. En algunos casos no hay un control riguroso del oxígeno administrado a los prematuros y la valoración oftalmológica oportuna de los mismos.

Aunque en febrero del año pasado se firmó un convenio entre la Superintendencia Nacional de Salud, la Asociación Colombiana de Neonatología y la Sociedad Colombiana de Pediatría para evaluar el cumplimiento de la garantía de la calidad en los servicios de estas unidades, solo a partir de este semestre se comenzarán las inspecciones a 33 de ellas.

El objetivo es verificar que cumplan los requisitos mínimos que les permita prestar una atención adecuada. “Las visitas se harán en seis departamentos”, dice Javier Morales Jácome, asesor de la superintendencia delegada para la atención en salud de la Supersalud.

 “Las secretarías de Salud son las responsables de visitar a estas unidades y tomar las medidas pertinentes en temas de habilitación o sanción;aunque deberían tener el 75 por ciento de los servicios verificados, están por debajo del 50”, afirma Marcela Giraldo, directora general de calidad de servicios del Ministerio de la Protección Social. Por eso –dice– la Supersalud reforzará las visitas.

 “Encontrar los problemas en las Ucin tiene que llevar a medidas que fomenten la calidad en este tipo de unidades de atención”, indica Sandra Camacho, directora médica de Acemi, gremio que reúne a las EPS privadas.

Ante las escasez de neonatólogos (en el país existen cerca de 190), se estableció que una unidad debe contar durante las 24 horas del día con un pediatra especializado en cuidado crítico y enfermeras con entrenamiento certificado en pediatría o neonatología.

A estas unidades ingresan, en promedio, 90.000 niños cada año.

Atención y discapacidad
“Un niño mal atendido puede quedar con discapacidades transitorias o permanentes; entre ellas parálisis cerebral, ceguera, sordera, y eso le cuesta al sistema”, agrega el doctor Hernando Baquero. “Si bien la supervivencia de los prematuros ha mejorado, no tenemos seguimiento de esas discapacidades o de problemas como déficit de atención y de concentración. Las unidades afirman orgullosas: ‘la mortalidad de mi unidad es muy baja’, pero ¿con qué calidad de vida están saliendo esos niños?”, dice Clara Galvis, jefe del departamento de pediatría y neonatología del Hospital Militar Central. El 13 por ciento de los niños que nacen en el país son prematuros.

 

Por Andrea Linares G.
Redactora ABC del bebé