Los tatuajes se
pueden borrar con la ayuda del láser, incluso después del embarazo
27 Ene
El número de sesiones
varía de acuerdo con el color de la tinta y con la calidad con que fue hecho.
Después de que una persona se ha hecho un tatuaje,
pareciera que esta marca es irreversible y que permanecerá por toda la vida en
la piel.
Sin embargo, actualmente existen métodos que permiten
borrar la imagen que se había dibujado y, además, en la gran mayoría de los
casos no tienen efectos negativos.
Uno de estos procedimientos es el de remoción de tatuaje
con láser Nd YAG. “Mediante este, se busca que los
rayos de la luz del láser atraviesen la piel y lleguen al lugar donde está la
tinta. La energía lumínica calienta la tinta, la fragmenta en pedazos pequeños
y el organismo logra eliminarla de manera espontánea”, explica el cirujano plástico
Ernesto Andrade.
A pesar de que no existe ninguna contraindicación para
practicárselo, se recomienda abstenerse de hacerlo durante el embarazo.
Cabe aclarar que si el tatuaje se había realizado con el
fin de cubrir alguna cicatriz, no hay ningún inconveniente en la realización
del procedimiento.
El especialista asegura que el número de sesiones para
borrar un tatuaje varía de acuerdo con el tamaño y el color, pues aquellos que
son solamente hechos en tinta negra son más fáciles de quitar que los que tienen
colores similares al tono de la piel, como el amarillo y el rojo.
El procedimiento de remoción de un tatuaje pequeño puede
durar unos cinco minutos; en cambio, uno de mayor tamaño puede requerir una
sesión de 15 a 20 minutos.
Además, el éxito del procedimiento depende también de la
calidad con que fue hecho el tatuaje.
Los resultados se podrán evidenciar en un plazo
aproximado de tres meses. Según Carolina Lorduy,
especialista en medicina estética y experta en láser, “los primeros ocho días
quizás se vean más inflamadas las líneas del tatuaje en la piel.
Posteriormente, el aspecto será normal y este irá aclarando paulatinamente,
como si se fuera destiñendo”.
Aspectos para tener en
cuenta
Según la dermatóloga Mónica Paredes, con estos procedimientos generalmente se
obtienen resultados positivos. Sin embargo, pueden presentarse cambios de
pigmentación en la piel, que dependerán del color y de la tez de cada persona.
Además, asegura que no existen riesgos médicos al hacérsela, a menos que la
persona tenga antecedentes de desarrollar queloides
(cicatriz anormal, gruesa, que duele, es roja y que es más grande que el sitio
original de la lesión). “En estos casos raros y exóticos, hay más
probabilidades de que por el láser se presenten de nuevo”, dice.