Síntomas de la tos ferina, un mal difícil de detectar

Dificultad para respirar, labios morados y tos persistente son los síntomas más frecuentes.

Aunque se asocia con adolescentes y adultos mayores, los neonatos también pueden padecerla.

La tos ferina es una enfermedad que podría afectar a 50 millones de personas en el mundo, pero solo se reportan 300 mil casos, afirma Tina Tan, infectóloga pediatra del Hospital Children of Chicago, invitada al pasado Congreso Nacional de Pediatría.

Uno de los grupos de población que merecen mayor atención es el de recién nacidos, a quienes no se diagnostica con facilidad, pues la enfermedad se asocia a adolescentes y adultos mayores. Esta enfermedad, explica la experta, es causada por el Bordatella pertussis, una bacteria que ataca las vías respiratorias y por esa razón es de fácil transmisión.

Una de las señales consiste en la incapacidad del niño para respirar, algunos presentarán tos y se ponen morados. Si no se les atiende a tiempo, las complicaciones podrían llegar a falta de oxígeno en el cerebro (hipoxia) o, incluso, la muerte.

La recomendación de la experta no solo es la vacunación de los bebés (2,4 y 6 meses, refuerzo a los 18 meses y antes de entrar al jardín), sino de sus familiares cercanos, que deben revacunarse cada 10 años.

Si el bebé presenta una tos que no pasa con los días, se recomienda acudir al pediatra