Los
laboratorios que produzcan o distribuyan en Colombia el misoprostol,
medicamento que interrumpe el embarazo, tendrán que remarcar sus empaques con banda
violeta, color con el que se distinguen drogas que son susceptibles de abuso o
pueden causar dependencia, razón por la cual deben tener
control especial para su venta.
La orden fue dada por el Consejo de Estado al Invima
a través de una sentencia que dejó en firme el uso de esa sustancia en los
programas de salud pública y que resuelve en apelación una demanda de acción
popular presentada por la Fundación Cronicare, que
pedía incluir cuatro medicamentos en el POS y restringir la venta del misoprostol.
El Consejo de Estado aceptó los argumentos presentados por los
demandantes -una institución sin ánimo de lucro que asesora a pacientes con
enfermedades huérfanas (raras) o crónicas-, que señalaron que el Invima estaba poniendo en riesgo la salubridad de las
personas al no cumplir las recomendaciones que hizo desde el 2001 la Comisión Revisora de la entidad, la
cual clasificó el misoprostol como medicamento de
control especial por sus efectos.
El misoprostol es una sustancia que puede interrumpir
el embarazo hasta en el tercer mes y es usado también para el tratamiento de
hemorragias posparto y la maduración del cuello uterino durante el parto. Ha
sido recomendado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) por su
efectividad y bajo costo y fue incluido a finales del año pasado en el Plan
Obligatorio de Salud (POS), en medio de una fuerte polémica.
El
procurador Alejandro Ordóñez trató de evitar que el medicamento hiciera parte
del POS para ser
utilizado en los tres casos permitidos por la Corte Constitucional.
El medicamento no es adictivo, pero por sus características el Invima decidió incluirlo, hace más de una década, dentro
del rango de "control especial", con el grupo de los oxitócicos.
En los próximos días se dará a conocer una resolución para informar a los
fabricantes sobre los cambios del etiquetado y todo lo pertinente para que la
vigilancia pase a manos del Fondo.
Comercialización restringida
Los
medicamentos de control especial son aquellos cuya comercialización está
restringida, dada su potencialidad de causar abuso o dependencia.
Se venden solo bajo fórmula médica y retención de esta. En Colombia se
distinguen con una franja violeta en el empaque.
REDACCIÓN
JUSTICIA