¡Qué terror montarme a un avión!

Si para usted volar es un drama porque no sabe cómo controlar sus nervios, los especialistas de la Universidad de Cambridge recomiendan comer ligero y equilibrado e incluir aguas aromáticas.

Top tres en aromáticas

Manzanilla: alivia indigestiones, diarreas, dolores de estómago, cólicos y gases; disminuye el estrés y la ansiedad; ayuda a conciliar el sueño.

Jengibre: mejora la circulación, facilita la digestión y es lo mejor para las náuseas y el estreñimiento.

Menta: detiene náuseas, diarrea, indigestión y gases.

¡Ojo con los oídos!

Durante las vacaciones los niños se ven más expuestos que de costumbre a las infecciones en los oídos, por su afición al mar y las piscinas.

La otitis es la más típica y se genera por la acumulación de líquido en el llamado oído medio y por la presión que se presenta sobre el tímpano.

Para prevenir, la 'Medical Health Association' recomienda que los pequeños usen tapones y gorro de baño, no viajar con gripa (la nariz tapada es la mejor aliada de la otitis) y evitar lastimar sus oídos con copitos de algodón.

En vacaciones

¡Pruébelo todo y sobreviva!

Seguramente para estas fechas nuestras mujeres bit ya tienen preparado el viaje de sus vacaciones navideñas, por eso escogimos estas recomendaciones para tener en cuenta antes de probar el primer plato en ese lugar exótico al que siempre han planeado ir.

¡Cuidado con el agua!

En restaurantes, casas u hoteles, es importante tomar sólo agua mineral. También, asegurarse de que lo que se consume ha sido preparado con agua embotellada.

Crudos, ¡pero limpios!

Cuando se trata de consumir frutas o vegetales crudos, lo mejor es asegurarse de lavarlos muy bien para quitarles los residuos químicos que pudieron quedarse alojados, sobre todo en las pieles.

Picantes, fuego para la garganta

Si se quiere disfrutar del picante, es mejor hacerlo de forma gradual para evitar irritaciones en la garganta que dañarían el placer de disfrutar la gastronomía del lugar que visita.

Comer a horas

Por agitada que sea su agenda turística, evite comer a deshoras, esto altera su organismo y puede generarle problemas, incluso meses después de su viaje. Lleve siempre una fruta o una barra de cereal para calmar el hambre y no sufrir de acidez.

Para las que deben cuidarse

Si es celíaca, diabética, hipertensa o sufre de otra enfermedad que la obligue a ser cuidadosa con las comidas, es imprescindible que aún en el viaje coma lo que debe. Lleve una lista de los ingredientes prohibidos.

Por Laura Agudelo / Fotos Otherdreamstime y Jupiter