Santiago Montenegro Trujillo, presidente de Asofondos
Esa no es una propuesta de Asofondos ni mía. Es
algo que va a pasar tarde o temprano.
El Gobierno se demoró 12 años en divulgar las tablas de mortalidad de la
población y hacerles un ajuste de acuerdo a como iba cambiando la esperanza de
vida. En ese lapso lo que hubo fueron ajustes paramétricos
al régimen de prima media del Seguro Social, y así se definió el régimen de
transición, el cual terminó el 31 de julio del 2010. De aquí en adelante, las
edades de jubilación van a subir de
Entonces, la reforma pensional del 2005 quedó
desfasada...
La reforma pensional del 2005 fue un paso
importante, pero quedó desfasada. El Gobierno debió haber ajustado las tablas
de mortalidad, cosa que hizo muy tarde.
Eso depende de otros parámetros como la tasa de reemplazo. Es decir, que si
esta tasa es muy alta habría que trabajar más. Pero si se baja un poco no
habría necesidad de subir tanto las edades. Sin embargo, por un lado o por
otro, se van a tener que hacer otros ajustes. Quiero dejar en claro que Asofondos no está planteando eso, sino que tendrá que
hacerse, pues así lo han dicho los analistas.
El entonces presidente Álvaro Uribe mencionó que uno de los ajustes que debe
hacerse es poner un impuesto a las pensiones y el Ministro de
Le corresponderá a los próximos gobiernos encarar
esta situación, pero la responsabilidad nuestra es plantear estos problemas,
pues el país no le puede dar la espalda a un problema serio que tiene el
régimen público de pensiones. Eso ya cuesta $25 billones anuales al erario y no
hay reservas. Y en términos de deuda podemos hablar de un 150% del Producto
Interno Bruto, PIB, que es algo gigantesco.
Eso ya se está haciendo en otros países. Puede ser una posibilidad hacia el
futuro. Las mujeres viven hoy más que los hombres. De hecho, la esperanza de
vida de las mujeres subió de 77 años a 85 años, y la de los hombres de
Es un problema muy serio. El nuevo Gobierno ha dicho que este tema es
prioritario porque afecta a toda la economía y las pensiones. Podría ampliarse
el contrato de aprendizaje por tres o cuatro años y que no se paguen
parafiscales por el primer empleo, y luego se vayan reajustando gradualmente.
Tarcisio Mora Godoy,
presidente de
h3>¿Es necesaria otra reforma pensional, pues la última apenas tiene cinco años de
aplicación?
Ese es un planteamiento de los fondos privados y con el cual buscan
justificar un aumento en la edad de jubilaciones para los trabajadores con una
tesis que no es cierta al decir que el promedio de vida, por ejemplo, de las
mujeres es de 85 años y de los hombres de 79. Esa esperanza de vida al nacer es
para la clase alta porque en las comunas de los barrios pobres, allí lo que
hace la gente es sobrevivir al hambre y las necesidades. Con esas estadísticas
se quiere buscar que cada vez los trabajadores no tengan acceso al derecho de
la pensión. Si se llegara a imponer una edad de jubilación a los 70 años, lo
que expediría Asofondos serían certificados de
defunción.
Sí. Aplicarle un promedio de condiciones de vida a un trabajador que nunca
ha descansado en su vida, que no tiene recreación, ni asistencia médica, y sólo
un salario mínimo, cuando lo pagan, es más que injusto.
No se justifica que habiendo pasado el Acto Legislativo 01 en el 2005, que
eliminó más de cien regímenes especiales, nos resulten ahora que es necesario
impulsar otra reforma pensional.
La sustentación que hace Asofondos no es cierta, y
cada año que pasa nos dicen que la reforma tributaria, por ejemplo, es la
última cuando no es cierto. Igual ha ocurrido con las reformas laborales, al
señalar que van a crear empleo. Todos esos cambios han afectado las condiciones
de quienes hoy trabajan en Colombia.
Por qué no ponen a cotizar a los altos empresarios de este país y se gravan
las altas ganancias de los banqueros. Con esa actitud, los empresarios y el
propio Gobierno lo que están incitando es un levantamiento social, pues la
gente no aguanta más estas reformas que recortan los pocos derechos de los
trabajadores. Si se quitaran las costosas exenciones a las multinacionales que
suman $7 billones, el Estado podría pagar sin problemas esas pensiones.
El interés de Asofondos y muchos empresarios es
que eso suceda para continuar restringiendo los derechos de los trabajadores en
materia pensional y prestacional.
El Acto Legislativo 01 del 2005 fue una imposición del Gobierno del presidente
Uribe para golpear la posibilidad de que los trabajadores en sus convenciones
colectivas pudieran mejorar su futuro, su vejez, pero finalmente el discurso
fue que era para controlar las altas pensiones. No compartimos esa dictadura en
leyes y reformas.
Los trabajadores informales son más de siete millones, y ese fenómeno ha
crecido porque no hay fuentes de empleo. Nos estamos acercando a un 62%, es
decir, personas que no tienen oportunidad de pensionarse en Colombia.