Gremios, investigadores y el mismo Gobierno
afirman que los costos de estos productos son muy altos. ¿Quiénes ganan y
quiénes pierden?
El precio de los medicamentos en Colombia parece no tener dolientes y el
mismo Gobierno reconoció esta semana que los costos de los fármacos en el país
son más altos que en muchas regiones de Latinoamérica, lo que tiene en jaque el
sistema de salud nacional.
Pero no son sólo los remedios de alto costo y biotecnológicos (a los que los
colombianos tienen que acceder vía tutela porque están fuera del Plan
Obligatorio de Salud), sino también los de uso común. Por ejemplo, diez
pastillas de amoxicilina de 500 miligramos en Cali
valen $2.700, las más económicas. En Ecuador este mismo medicamento cuesta
$650. Asimismo, 10 cápsulas de Atorvastatina (que se
usa para reducir en colesterol), valen en la ciudad un promedio de $16.000; en
Ecuador se consiguen en $9.464 y en México en menos de $7.000, según un sondeo
realizado por El País el pasado viernes.
Estas diferencias llevan a preguntarse a los colombianos ¿quién fija los
precios de los medicamentos?
No hay una respuesta clara para esta inquietud, pues Colombia viene de una
liberación de precios realizada en el Gobierno del expresidente
Álvaro Uribe, y apenas inicia una nueva etapa hacia el control de los costos de
los principales fármacos que se comercializan en el territorio nacional, en
especial por el costo que le ha significado el pago de medicamentos al
Gobierno.
Se calcula que en el 2010 los recobros por servicios no POS (los que no
están incluidos en el Plan Obligatorio de Salud) le costaron al Estado $2,4
billones y el 82% correspondieron a medicamentos. Por esta razón, desde el año
pasado la Comisión Nacional de Precios de Medicamentos (conformada por los
ministerios de Salud y Comercio) está tomando medidas y el pasado jueves fijó
un valor máximo de venta en el canal institucional para 70 remedios que se usan
para enfermedades como la hipertensión, insuficiencia cardiaca, acidez gástrica
y artritis.
Sin embargo, para el canal comercial, el de las farmacias, no hay una
decisión concreta y el Ministerio de Comercio, informó sólo que desarrollará
una metodología para ejercer el control de precios al consumidor en general.
El más reciente estudio de Fedesarrollo sobre la
salud, indica que la falta de una política clara de precios ha llevado en parte
al desfinanciamiento del régimen contributivo por los
sobrecostos que ha tenido que pagar el Estado por
estos productos.
El Gobierno asegura que el 34% de los colombianos que acude al médico no
recibe los remedios y que entre 2005 y 2010, las dosis consumidas de alto costo
aumentaron mil por ciento y el valor 847%.
Emilio Sardi, vicepresidente de Tecnoquímicas, considera que una parte del problema está en
los precios de medicamentos biotecnológicos, pues en general “en estos
productos hay monopolios de multinacionales que imponen tarifas altas y que no
tienen competencia. Mientras se mantengan esas barreras no será posible bajar
costos”, dijo.
Para el ejecutivo, en la mayoría de los casos, los precios de los
medicamentos en Colombia no son más altos que en otros países, porque hay mucha
competencia y diversidad de oferentes y considera que existen precios de venta
incluso mucho más bajos que el promedio internacional.
Francisco de Paula Gómez, presidente de Afidro
(entidad que reune a laboratorios de investigación),
coincide en que en el mercado local hay mucha competencia y se encuentran
productos de todos los precios, y algunos muy baratos. Pero cree que el
Gobierno sí ha venido pagando mucho por los medicamentos por la intermediación
que “en algunos casos es del 500% sobre el valor al cual lo vende inicalmente el laboratorio”.
El error, para Óscar Andia, vicepresidente de
política farmacéutica de la Federación Médica Colombiana, FMC, fue haber
permitido en el pasado la liberación de precios, pues debido a eso los
laboratorios vendieron sus productos a costos superiores y “los intermediarios
le cobraron al Fosyga al costo que quisieron. Hubo
prácticas perversas, laboratorios que cobraron más y que indujeron la demanda.
Eso generó la crisis de hoy”, dijo.
Álvaro Reyes, investigador de Econometría, entidad que ha realizado varios
estudios sobre el sector, dice que el problema es que el país tiene un sistema
de información de precios que no opera de forma eficiente y sólo se está usando
para mirar el gasto de la Nación y tomar unas decisiones en el canal
institucional.
Pero cree que se ha hecho poco para vigilar el costo de los remedios que
compra el consumidor en las farmacias y controlar otros factores que afectan el
mercado como los monopolios con productos nuevos y la influencia de los médicos
en la formulación. “Esto no es fácil de regular”.
Estudios de la Federación Médica Colombiana, FMC, indican que el país pagó sobrecostos del orden de $668.431 millones en una muestra
de 48 medicamentos biotecnológicos entre los años 2008 y 2011.
Dicha información se dedujo de un análisis hecho a los precios que
suministraron las mismas compañías farmacéuticas al Ministerio de Salud.
El Gobierno Nacional reconoció esta problemática.
El presidente Juan Manuel Santos dijo “que el precio de cuatro medicamentos,
de seis que se han identificado como los que tienen algún tipo de influencia monopólica, está un 30% por encima de otros países de
América Latina”.
38 medicamentos absorbieron el 80% del total de los recobros al Gobierno en
una muestra de 105 productos que fueron reclamados por trece Empresas
Promotoras, EPS, en el 2011.
Entre el 2003 y el 2011 los colombianos pagaron $800.000 millones más por
remedios cuyos precios se elevaron al no tener competidores en el mercado,
según una investigación publicada por la Universidad Nacional.
Este trabajo indicó también que el gasto del sistema de salud para productos
con exclusividad de datos fue de $2,3 billones en 2011 y habría sido de $1,5
billones con competidores.
La firma Acción Internacional para la Salud, hizo un análisis de 10
productos de marca original y encontró que 8 eran más caros en Colombia que en
países como Ecuador, Venezuela, Perú y Bolivia.
En el informe sobre la situación farmacéutica del país se afirma que los
remedios de laboratorios internacionales aumentaron su costo 50%, en el periodo
2007 a 2010.