Por el no pago de $6000 millones, las Empresas
Sociales del Estado, ESE, cortaron servicios de primer nivel a usuarios de Caprecom.
Las Empresas Sociales
del Estado, ESE y la EPS Caprecom libran una puja
económica que tiene en vilo la atención de más de 115.000 caleños afiliados a
dicha entidad.
Consultas externas,
odontología, laboratorio clínico y otros servicios fueron suspendidos en
centros de salud de primer nivel para los afiliados de Caprecom,
debido a que aún las partes no se ponen de acuerdo en el pago de más de $6000
millones de acreencias de la EPS del régimen subsidiado a las ESE.
En
cinco días de suspensión de estos servicios, “encontramos casos en que las
mujeres embarazadas no está recibiendo la atención por controles prenatales. A
los pacientes de alto costo no saben a dónde remitirlos. Incluso nos
encontramos a un niño con fiebre de 39 grados a quien, por ser afiliado a Caprecom, se le negó la atención”, denunció la asesora para
la Atención a los Usuarios en Salud, Mariluz Zuluaga, tras realizar una serie de visitas a los centros
de salud.
Hoy,
por ejemplo, la ESE Centro, que maneja el pool de ambulancias para Cali,
definirá si el servicio de traslado de pacientes de Caprecom
también se cancelará.
Según
Miyerlady Torres, gerente de la ESE Centro, “Caprecom quiere pagar $299 por paciente por ese servicio,
cuando el año pasado pagaba $540”.
El
Hospital Universitario del Valle canceló consultas externas y cirugías
programadas, entre otros, porque, según Jaime Rubiano, director de la casa de
salud, aún no hay acuerdos para que Caprecom pague
los más de $20 mil millones que le adeuda.
“Hay 130 pacientes de Caprecom hospitalizados y como estamos en contra de las
injusticias, los vamos a atender hasta que estén bien”, dijo.
Razones económicas
La
firma del contrato de prestación de servicios entre Caprecom
y las ESE para este año y el pago de cartera por parte de la EPS son los puntos
de la discusión.
De acuerdo con Diego
Calero, secretario de Salud de Cali, del total de la deuda ($6000 millones)
correspondiente a servicios del 2012 y febrero y marzo del 2013, “Caprecom propuso pagar $1500 millones, pero les puso como
condición a las ESE firmar el contrato antes de pagar”.
El
incremento en la tarifa de Unidad de Pago por Capitación, UPC, (lo que paga la
EPS por usuario atendido) es otro de los temas en discordia.
“El
año pasado eran $11.500 por paciente y estamos pidiendo un incremento de ese
valor de un 15 %. Pero solo quieren aumentarnos un 3 %, aunque logramos pactar
una cuota de $14.900 por paciente”, dijo Miyerlady
Torres, de la ESE Centro.
María
Piedad Echeverry, gerente de la ESE Norte, aseguró
que “nosotros sabemos que la vida predomina por encima de lo financiero, pero
esto que está pasando es una perversidad. Aún así, garantizaremos la atención de
urgencias vitales porque es nuestro deber”.
Mientras
las ESE cerraron los servicios, Caprecom abrió una
red alterna con IPS privadas, “pero estas no tienen contratos con Caprecom porque saben que no les pagan. Hay unas que no
están habilitadas o quedan muy lejos de las ESE. Dígame, ¿Qué IPS está
habilitada para prestar servicio en Aguablanca?”,
denunció José Villamil, veedor nacional de salud.
Caprecom dispuso, además, la prestación de servicios en los
hospitales Mario Correa Rengifo e Isaías Duarte Cancino, pese a que el
secretario de Salud del Valle, Fernando Gutiérrez, afirmó que “aunque deseamos
apoyar la atención, no nos comprometemos a atender toda la población de Caprecom porque no tenemos la habilitación técnica para
prestar servicios Nivel I”.
El
País intentó contactar a la gerente general de Caprecom,
Luisa Fernanda Tovar y al gerente regional, Alejandro Delgado, pero se
abstuvieron de dar declaraciones frente al tema.
Mientras
el tema económico se supera, Mariluz Zuluaga dijo que “independientemente de las negociaciones,
no se puede jugar con la vida de los pacientes”.