A esas pilas gastadas que usamos para encender un juguete, la cámara digital
o incluso un radio, y que usualmente botamos a la basura sin pensar que son
altamente contaminantes, ya les podemos dar un mejor destino.
Después de tres años de conversaciones, los fabricantes y los importadores
de estas baterías, con el aval del Ministerio del Medio Ambiente y de
Bogotá es pionera en la aplicación de esta resolución. En la ciudad ya
funcionan dos puntos de recolección: están en los centros comerciales Hayuelos (carrera 20 No. 82-52) y Palatino (carrera 7a. con
calle 140).
Desde agosto habrá 8 más, tanto en la capital como en Manizales y Medellín.
Y en diciembre del 2011, funcionarán 120 lugares de almacenamiento (también
en San Andrés), porque en ese año, fabricantes e importadores deberán recoger 8
millones de pilas.
Ese número tendrá que subir a 20 millones en el 2016 y a 90 millones en el
2021.
Estas cifras no son opcionales y deberán cumplirse obligatoriamente.
Anualmente, en Colombia se consumen 200 millones de pilas, que generan 11
mil toneladas de residuos. El 80 por ciento va a parar a rellenos sanitarios y
el 20 por ciento a botaderos a cielo abierto, ríos o quebradas.
El riesgo es que estas baterías contienen zinc, cadmio, níquel, plomo y
mercurio y, si su fabricación no es idónea (muchas llegan de contrabando al
mercado y no cumplen con las reglas sanitarias), esos elementos químicos pueden
entrar en contacto con el medio.
Unas pocas gotas de esas sustancias pueden contaminar millones de litros de
agua. De ahí que su destrucción sea urgente cuando la vida útil de la pila
termina.
“La ciudadanía ya no tiene excusa para no deshacerse correctamente de las
pilas. Esto incluye un cambio de conciencia en el sentido de que no toda la basura
que generamos nos la tienen que recoger en la puerta de la casa.
También tenemos que contribuir, como sucede en Europa, clasificándola y
llevándola a un punto donde puede ser tratada correctamente y luego destruida”,
dijo el ministro de Medio Ambiente, Carlos Costa.
SE RECOGEN OTROS CONTAMINANTES.
Colombia se ha vuelto un referente en América por sus programas de posconsumo. Como la resolución que obliga a instalar puntos
de recolección para destruir pilas, existen otras que se aplican
indefinidamente para bajar la contaminación de: Envases de plaguicidas: se han
recolectado 2.377 toneladas por fabricantes e importadores.
Medicamentos vencidos: funciona en Bogotá y Medellín. Se han recogido
Bombillas, computadores baterías de carros: habrá planes de recolección a
partir de agosto y septiembre de este año