'La gente nos trata a las
patadas', se quejan los pies
Los
pies aseguran ser víctimas de uso excesivo y de malos tratos.
No
se sabe si es porque están siempre en contacto con el suelo o porque no son tan
visibles ni glamurosos como otras partes del cuerpo,
"lo cierto -aseguran los pies- es que nos tratan a las patadas".
Se
quejan de que, pese a ser la estructura que mantiene a las personas erguidas y
la que hizo posible que los humanos liberaran sus manos para transformar el
mundo, siempre son infravalorados.
"Llevamos
a la gente a todas partes, pero solo se acuerdan de nosotros cuando
molestamos... Pero créanos que no es por gusto, eso pasa cuando no aguantamos
más el uso y el abuso", dicen.
¿Por
qué insistieron en contestar juntos esta entrevista?
El kit básico del cuerpo trae dos pies. Somos complementarios,
esenciales; nos apoyamos mutuamente, equilibramos toda la estructura y nos
cuesta vivir el uno sin el otro. Además, usted siempre está "de
pies", no "de pie...".
¿Quiénes son ustedes en realidad?
Somos
estructuras complejas y con funciones muy especializadas. Piense no más que
cada uno de nosotros tiene 26 huesos y 33 articulaciones, que son
complementadas con más de 100 músculos, ligamentos y tendones, que deben
funcionar como un relojito. A eso súmele venas, arterias, nervios, piel,
uñas...
Perdone la pregunta tonta pero, ¿para qué sirven?
No
se subestime, la pregunta no es boba; la mayoría de
la gente ignora que tenemos funciones estáticas y dinámicas. Con las primeras
adaptamos el cuerpo al relieve del piso y lo estabilizamos; con las segundas
amortiguamos las fuerzas y utilizamos la energía para movernos.
¿Cuál
es su talón de Aquiles?
En
realidad ni es uno ni es talón... Tenemos varios puntos débiles; entre los que
más nos afectan están deformidades como la falta de arcos en la planta (pie
plano), el aumento de ellos (pie cabo), el equino (cuando no hay apoyo en el
talón) o el talo (cuando sólo hay apoyo en el talón). También hay juanetes,
uñas encarnadas, infecciones y la manifestación de múltiples males, como el pie
diabético, que es una tragedia, y la artritis.
¿Y
ustedes nacen con esas deformidades?
Hay
unas congénitas y otras adquiridas por problemas neuromusculares,
traumas y malos hábitos, como el uso indebido de zapatos fabricados pensando
más en la moda que en protegernos.
¿Cómo
es eso?
Los
tacones son la muerte... Usted no se imagina el dolor que nos causan, sobre
todo adelante; nos obligan a trabajar el triple, lo que afecta a todo el
cuerpo. ¿Y qué tal los zapatos puntudos? Eso es
horrible... ¡Eso es juanete y callos a la fija!
¿Y
acaso no son resistentes?
¡Claro
que lo somos! Para la muestra este datico: una
persona con 60 kilos de peso, que camine unos 12 mil pasos al día (algo que
está dentro del promedio) nos representa a nosotros la bobadita de 720
toneladas de peso por jornada. ¿Eso le parece poquito? Es que el abuso es
mucho...
Casi nunca uno va al médico por los pies. ¿Cuándo hay que hacerlo?
Es
una buena pregunta. Empecemos por decir que no es normal que a la gente le
duelan los pies, así que siempre hay que consultar. También si nos ven
inflamados, con deformidades, con lesiones en la piel, sensación de calambres,
adormecimientos y problemas en las uñas. ¡Por ahí se meten unos bichos
terribles!
¿Por
qué su mal olor es tan famoso?
La
mayoría de las veces es por desaseo, mala higiene o mal secado. También es por
bacterias y enfermedades. Ahora, si por su mal olor se le pegó a la pata de la
cama, consulte ya.
'Y
si quiere cuidarnos mejor...'
Revise
con cuidado la piel que nos reviste, incluso entre los dedos, y las uñas por lo
menos una vez a la semana; si encuentra alguna lesión, escoriación,
endurecimiento o mancha, consulte.
No
nos torture con zapatos puntudos ni demasiado altos,
máximo si nos pesca callos o deformidades, como juanetes. Corra al médico.
Consiéntanos. Ensaye, por ejemplo, a meternos primero en agua fría y luego en
agua caliente; alterne cada diez minutos. Usted se sentirá mejor y nosotros,
también.
Si
tiene diabetes extreme los cuidados; ojo con el agua caliente y las lesiones, y
deje que alguien que sepa nos corte las uñas.
Una
pauta sobre su estado de salud
Los
Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos también han emitido una serie
de recomendaciones para tener pies sanos.
Lávese
los pies diariamente con jabón y agua tibia. Después, séquelos muy bien.
Córtese
las uñas rectas de un lado a otro y no las deje demasiado pequeñas.
Use
zapatos cómodos y que le queden bien. Ni muy apretados ni muy sueltos.
La
salud del pie puede ser una pauta sobre su estado general de salud. Por
ejemplo, la rigidez de las articulaciones puede significar artritis.
El
hormigueo o el entumecimiento pueden indicar diabetes. La hinchazón puede ser
la señal de una enfermedad renal, enfermedad cardiaca o hipertensión arterial.
El
cuidado y los exámenes frecuentes de los pies son una parte importante de su
cuidado de salud general. Si tiene problemas en los pies, consulte de
inmediato.
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8.000 a 12.000 pasos diarios da una persona, en promedio
A ese ritmo, un hombre normal recorre la distancia equivalente a darle cuatrovueltas a la Tierra, durante su vida.
CARLOS
F. FERNÁNDEZ
Asesor médico de EL TIEMPO