Se hundió proyecto sobre
prohibición del aborto en Colombia
Fueron
9 votos contra 7 los que hundieron la reforma constitucional, promovida por los
conservadores.
La
Comisión I del Senado le cerró el paso legislativo este miércoles a la reforma
constitucional que buscaba prohibir en todos sus formas al aborto, con el
argumento de defender la vida.
Las
diferencias políticas que se evidenciaron en el debate del proyecto de acto
legislativo que proponía la penalización del aborto en Colombia, inclinó la
balanza a favor de quienes no compartían que las tres causales avaladas por la
Corte Constitucional para la interrupción de un embarazo fueran judicializadas, lo que redundó en que la enmienda
constitucional fuera archivada en la Comisión Primera del Senado.
Este
proyecto, de iniciativa del Partido Conservador, determinó que esta
colectividad no contara con el acompañamiento de las bancadas de la Unidad
Nacional, que se fragmentaron a la hora de la votación con la que se buscaba
que el aborto en los casos de malformación del feto, riesgo inminente de muerte
de la madre y embarazo como consecuencia de una violación fuera penalizado.
Luego
de tres días de deliberaciones, la Comisión Primera hundió la iniciativa con 9
votos en contra frente a 7 a favor, lo que determinó el archivo de la
propuesta. En el debate estuvo ausente el senador liberal, Juan Manuel Galán, y
minutos antes de la votación se retiró del recinto el conservador Eduardo
Enríquez Maya.
La
decisión ya impulsó que el Partido Conservador anunciara que van a comenzar las
labores para convocar un referendo constitucional para que sea el constituyente
primario el que decida.
El
senador Hernán Andrade dijo que “el debate está abierto y eso quedó evidenciado
en la votación. En la Corte creo que fue 5-4 y en la Comisión fue 9-7. El país
está dividido y por ello vamos a analizar la posibilidad de un referendo
popular para que, en últimas, sea el pueblo el que decida”.
El
de este miércoles fue un debate agudo en la Comisión Primera, en donde las
partes defendieron cada una de las posiciones que tenían. Finalmente primaron
las posiciones en contra de la propuesta.
Dos
senadores eran clave para la decisión final del proyecto. Se trataba de los
congresistas Luz Karime Motta
y Carlos Enrique Soto, ambos de la U, quienes finalmente anunciaron que no
acompañaban la iniciativa.
Motta, quien el lunes había
dicho que iba a votar a favor el proyecto, este miércoles dio un giro
inesperado y al sustentar su posición dijo que “no me siento con autoridad de
condenar a una madre de decidir si tiene un niño en su vientre durante nueve
meses y tener a su bebé sólo unas cuantas horas en sus brazos”.
La
senadora, única mujer de esta comisión, aseguró además que “este acto
legislativo no va a impedir que las mujeres vayan a las clínicas a abortar” y
paso seguido anunció su voto negativo.
Mientras
tanto, el senador Soto reconoció que el Estado no ha cumplido con el
compromiso que tiene de acompañar clínica y moralmente a una mujer que se acoge
a las causales de la Corte Constitucional para abortar y dijo que esa atención
“no existe en Colombia”.
Sin
embargo, consideró que este tema no debía ser elevado a rango constitucional,
sino que debía tratarse a través de una ley ordinaria, en las que se
establecieran las reglas de juego claras en materia de la prohibición del
aborto en los casos que no contempla la Corte Constitucional. Esta razón, dijo,
lo impulsó a no acompañar el proyecto.
Pero
el ambiente tomó matices de controversia. Un rifirrafe fue protagonizado
entre el presidente del Directorio Nacional Conservador (DNC), senador José
Darío Salazar y el congresista de la U, Roy Barreras,
quien dijo que no había posibilidades de que este acto legislativo “impida la
decisión de una mujer de abortar” y enfatizó que el delito del aborto es
improbable en materia penal.
A
esto, Salazar, autor de la iniciativa, respondió que “si penalizamos el
homicidio, el homicidio seguirá; si penalizamos el narcotráfico, el
narcotráfico seguirá, entonces ¿para qué los penalizamos?”, y luego arremetió:
“Esto no es argumento para no penalizar el aborto”.
Otro
hecho que causó estupor fue en la intervención del presidente del Congreso,
Juan Manuel Corzo, quien antes de empezar pidió que se proyectara un video
sobre un procedimiento abortivo en primer plano, lo cual generó el rechazo de
los congresistas y asistentes.
El
presidente de la Comisión, Luis Fernando Velasco
conminó a Corzo a no proyectar el video, quien finalmente accedió. Además, el
senador Barreras hizo una solicitud similar.
No
obstante, el senador ponente, Manuel Enríquez, criticó al presidente Luis Fernando Velasco y lo acusó de que no hubo garantías
para sustentar el proyecto.
Velasco
respondió que él había actuado conforme al reglamento y que en ningún momento
fue “tramposo”.
Finalmente,
Mónica Roa promotora de la despenalización del aborto en tres casos extremos
dijo: “Es una decisión histórica, los derechos de las mujeres se consolidan
cada vez más en Colombia. Creo que una vez hundido el proyecto, queda exigir
ante la Corte la eliminación de las barreras a las mujeres”.
Dato clave
Alejandro
Ordóñez, procurador, calificó como un golpe a la vida la decisión. “Si no se
respeta la vida por nacer qué vamos a esperar de las personas en una sociedad
que se empeña en su actitud hedonista”.