No hay médicos para ciertas especialidades: presidente Nueva EPS

José Fernando Cardona, presidente Nueva EPS.

En 24 meses que lleva funcionando la Nueva EPS, entidad que asumió la administración en salud que realizaba el desaparecido Instituto de Seguros Sociales, ISS, los logros son importantes, pero no suficientes como para decir que ha sido un verdadero éxito.

Se destacan la reducción de los gastos anuales del presupuesto general y los nuevos planes de modernización y diversificación del servicio que buscan agilizar la atención a los usuarios.

“Mientras que el ISS se gastaba el 28% del presupuesto anual, la Nueva EPS sólo utiliza el 9%, Esos 19 puntos los estamos utilizando en mejorar el servicio”, explica José Fernando Cardona Uribe, presidente de la empresa.

Pese a ello, sostiene que uno de los grandes problemas que hoy afronta es la consecución de médicos especialistas para algunas áreas que son vitales para los afiliados, como endocrinología, reumatología y nefrología pediátrica.

¿Cómo ha hecho para limpiar la mala imagen que para muchos dejó el Seguro Social?

La única forma es modernizando, diversificando y mejorando los servicios. Eso lo estamos haciendo poco a poco.

¿Pero los usuarios encuentran diferencias favorables frente al antiguo ISS?

Sí, de acuerdo con la encuesta más reciente cuatro de cada cinco usuarios manifiesta que hay un cambio positivo y que hay una mejoría respecto de la anterior aseguradora, que era el Seguro Social.

La señal que validamos con la encuesta es que hemos tenido cambios en el tema de servicios, en términos de garantizar la entrega oportuna de medicamentos, así como en el manejo y en la atención de patologías crónicas y de alto costo. Aunque todavía hay mucho por consolidar en la Nueva EPS.

Otro factor que nos diferencia es que el Instituto de Seguro Social se gastaba el 28% del presupuesto anual en gastos administrativos. Nosotros nos gastamos el 9% al año. Esos 19 puntos se van a prestar más servicios.

¿Como cuáles?

En la parte administrativa y transaccional estamos introduciendo tecnología en lo que tiene que ver con el portal transaccional, que no es más que poner la EPS en línea.

Los empleadores y los afiliados podrán solicitar una clave para que pueden hacer transacciones, pero también puedan solicitar el pago de las incapacidades, ver los días de incapacidad y pedir certificaciones de pago, entre otros servicios.

Eso está muy bien, pero al usuario le interesa que lo atiendan bien y rápido. ¿En eso qué cambios hay?

Hemos venido mejorando la oportunidad en el servicio, pero tenemos dificultades en cuatro especialidades. Ellas son: endocrinología, reumatología, nefrología pediátrica y neuropediatría. Aunque no es un problema sólo para nosotros, sino para todo el sistema, porque el numero de especialistas en esas áreas es reducido.

Las especialidades básicas las estamos atendiendo de manera adecuada y las consultas de medicina general y de odontología están dentro de los tiempos normales, en menos de 72 horas.

¿Cuál es la edad promedio de los afiliados?

El 85% es mayor de 75 años, aunque otro gran porcentaje es de 45 años. Tenemos una carga grande de pacientes adultos mayores.

¿Usted cree que esas personas van a utilizar el internet para acercarse a la entidad?

Allí tenemos un gran reto, pero tenemos dos frentes para trabajar.

Uno es seducir a potenciales nuevos afiliados y a los jóvenes porque necesitamos crecer en afiliados y ellos quieren todo ya.

El segundo es para los viejos y en esa parte tenemos un plan para que aprendan de tecnología. Estamos haciendo un trabajo con una fundación que los ayudará a utilizar el computador. Será una tarea dura, pero daremos la lucha.

¿En total cuántos afiliados tiene hoy la entidad?

2.275.000. En esos términos somos la tercera EPS más grande del país, después de Saludcoop y Coomeva.

¿Cuál es su gran apuesta para los próximos dos años?

La Nueva EPS deberá tener, primero, incorporada la tecnología que le permita que las transacciones administrativas se puedan hacer sin necesidad de estar cara a cara con el usuario.

Segundo, en el tema de afiliados, mantener la participación y estar por encima del mercado unos dos puntos, eso es llegar a los 2.350.000 afiliados.

Tercero, en el servicio, aspiramos a consolidarnos para disminuir la hospitalización de los pacientes. Para ello vamos a hacer alianzas con entidades hospitalarias. En ese sentido, con Comfenalco y la Universidad Libre estamos haciendo un trabajo especial para que nos garanticen la cobertura en las especialidades.

En el caso de Cali vamos a trabajar oncología con la Fundación Valle del Lili. Pero adicionalmente, estamos definiendo formas de trabajo con aliados estratégicos para posibilitar un mejor servicio a los usuarios.

Pero será otro reto por las dificultades de conseguir médicos especialistas... ¿Esas son sus preocupaciones?

Tengo dos. Una es mirar cómo se puede lograr la estabilidad en el costo médico, pues viene creciendo bastante. Tengo instituciones en las que el valor del medicamento está entre 50% y 80% por encima del verdadero precio de compra.

La segunda es lograr estabilizar los recobros por el No POS al Fosyga, que tiene una cartera con nosotros de $240.000 millones.

El ciclo de pagos que utiliza es de 120 días y nos parece muy largo, teniendo en cuenta el volumen de atenciones que tenemos. El reto es reducir ese pago a 90 días, ya que eso nos posibilitaría el pago oportuno a nuestros proveedores.

El otro lío está en la entrega de los medicamentos a los afiliados...

A nosotros nos proveen Colsubsidio, Comfandi y Audifarma. Tenemos garantizado el suministro de medicamentos, aunque hay algunos, los de alto costo, que por su rotación no se pueden mantener en ‘stock’, pero los usuarios los solicitan y en unas 48 horas se les entrega.

¿La regional del Suroccidente afronta esos mismos problemas?

Para empezar le quiero contar que la componen seis departamentos. Como regional tenemos 590.000 afiliados y el Valle participa con el 50%. Hacemos presencia desde el Eje Cafetero hasta Nariño.

No me respondió...

Sí, la gran carga de pacientes de alto costo es especialmente grande y los líos son la disponibilidad de camas y de especialidades y subespecialidades, pues la oferta de especialistas no es suficiente. Por eso trabajaremos con la Fundación Valle del Lili y con otras entidades a través de alianzas.

¿Cuántas sedes propias funcionan en en Cali?

De atención al cliente dos, una en el barrio Versalles y la otra en la Avenida Roosevelt con 39 y entidades no propias, pero que funcionan para nosotros, son seis, todas de primer nivel.

Se avecinan cambios en el sistema de salud No POS, ¿cree que esos ajustes solucionarán los problemas?

El sistema en este momento está en desequilibrio y desfinanciado porque los servicios que están fuera del paquete básico del POS están desbordados y el costo es muy alto. El año pasado alcanzó los $2,4 billones en todo el país.

El Gobierno tiene que tomar dos medidas de corto plazo para encontrar la solución. La primera es actualizar el POS, y la segunda, presentar una ley estatutaria que se defina claramente cuál es el núcleo del derecho a la salud en el país.

Si eso no se hace el sistema queda al borde la quiebra y todas las EPS estaremos en líos, con serios problemas para financiarnos.

La Nueva EPS

Datos claves

Cuando existía el ISS el porcentaje de confiabilidad era del 78%, hoy, con la Nueva EPS, ese índice subió al 90% y la entidad lleva operando apenas dos años, señala un informe de la compañía al cierre del 1 de agosto.

De acuerdo con estadísticas de la Nueva EPS, hoy atiende a 44.500 pacientes de alto costo, en promedio, al mes. El 85% de los pacientes mayores de 75 años del régimen contributivo está afiliado a la entidad, dice Cardona.