Los mitos de la donación de
sangre
Donar sangre
engorda, enferma y sale caro. Esos son los tres mitos más comunes.
"Todos
son falsos; al contrario, donar permite mejorar la disponibilidad de oxígeno en
los tejidos y, además, convierte a las personas en seres más solidarios, que
pueden salvar vidas", asegura Juan Gonzalo López, director del Instituto
Nacional de Salud (INS).
Muchos
piensan que la sangre que se pierde en una donación debe recuperarse comiendo
más de la cuenta, pero eso no es necesario, pues la médula ósea empieza a
producir nuevas células tan pronto termina el procedimiento.
Ahora que se
celebra un nuevo Día Mundial del Donante de Sangre, el INS lanzó una campaña
que busca promover una cultura de la donación en los niños, para que no lo
piensen dos veces cuando crezcan y puedan hacerlo (véase recuadro). Para eso,
el INS creó unos kits con muñecos, calcomanías y una cartilla en la que los
niños aprenden qué es la sangre y por qué es importante donarla.
Según Magda
J. Rodríguez, del Programa Nacional de Promoción de Donación de Sangre, el plan
piloto se lanzó en Boyacá, uno de los departamentos más juiciosos en este tema,
pero la idea es ampliarlo poco a poco a todo el país.
"Colombia tiene 15 donantes por cada 1.000 habitantes y la idea es subir a
17 de aquí al 2014, pero eso no es fácil", reconoce López. Y parte de la
estrategia creada para alcanzar esa meta pasa por eliminar los mitos.
Uno de los
más enquistados es el de que hay que pagar por donar. Falso: se cobra por la
captación y el procesamiento, pero eso lo paga el sistema, no el donante ni el
paciente. El otro mito es que hay que obedecerles a los hospitales que
condicionan una operación a que los familiares de los pacientes consigan sangre.
Así funciona
la red
La Red
Nacional de Sangre, que depende del Instituto Nacional de Salud (INS), está
compuesta por 94 bancos de sangre repartidos en 25 departamentos y de 400
hospitales que reciben la sangre y los hemocomponentes
de la sangre de los bancos. Cuando se dona sangre, ésta es separada en bolsas
independientes con sus diferentes componentes: glóbulos rojos, plaquetas y
plasma. Los glóbulos blancos separados no suelen transfundirse. Según Mauricio
Beltrán, coordinador de la Red, en San Andrés, Chocó, Amazonas, Guaviare,
Vaupés, Vichada y Guanía no se captan donaciones y no
hay bancos de sangre, pues "el costo es mucho más alto y, entre otras
cosas, la población está muy dispersa" por el territorio para hacerlo.
"Allí
lo que tenemos son centros de transfusión, que reciben la sangre que necesitan
de grandes ciudades como Bogotá, Medellín, Cali y Bucaramanga. En esas regiones
la sangre puede estar entre 35 y 45 días, y si pasado ese tiempo no es
utilizada, se devuelve a las ciudades", explica el funcionario.
La logística
se complica en las zonas de conflicto. Para esos casos, según Beltrán, también
se cuenta con redes especiales de la Policía y del Ejército. Si entre esas y
los bancos de sangre del INS no logran garantizarse las necesidades de sangre,
"se compran componentes sintéticos".
Requisitos para donar
Para donar
sangre sólo se necesita ser una persona sana, mayor de 18 años y menor de 65, y
pesar más de 50 kilogramos. Si se hizo un tatuaje debe esperar al menos un año
para hacerlo. Donar sangre no sólo es un acto de solidaridad sino que es bueno
para la salud, porque con ese acto se estimula a la médula ósea para que
produzca más sangre y, como se renuevan los glóbulos rojos, se oxigenan más los
tejidos. Los adultos tienen casi 5 litros de sangre en su cuerpo y, en una
donación, se extraen 450 mililitros.
Buscan producir sangre artificial
Un grupo de
científicos de cuatro universidades de Escocia está trabajando en un proyecto
pionero de producción de sangre a gran escala, a partir de células madre, para
transfusión en seres humanos. Según ellos, no se trata de hacer sangre
artificial, sino glóbulos rojos "similares a los que el ser humano tiene
en su organismo, pero producidos en el laboratorio".
REDACCIÓN
SALUD