Investigación al Hospital de
Kennedy por muerte con virus de nueva gripa abre la Secretaría de Salud
En
el Hospital Kennedy han dispuesto dos carpas para atender a los enfermos con
virus respiratorios. Este año van tres mil examinados.
Lo
hace por incurrir en presuntas fallas de oportunidad y de calidad en la
prestación del servicio a la paciente de 28 años que falleció en Bogotá, el
pasado 4 de junio, por influenza AH1N1.
Entre
las fallas que identificó la Comisión de Vigilancia y Control de la SDS
"que el pasado viernes hizo una inspección a dicha institución" está
el posible error en el diagnóstico de la enfermedad que la mujer padecía.
De acuerdo con el seguimiento que hizo la comisión, la paciente llegó a las
6:08 de la tarde del pasado primero de julio, a las urgencias del Hospital
Occidente de Kennedy y presentó siete de los 10 síntomas que la institución, en
su protocolo de ingreso, tenía señalados como característicos de la nueva
gripa: fiebre de 39 grados centígrados, vómito espontáneo, tos, dolor de
cabeza, dolor de garganta, rinorrea y malestar
general.
La
paciente, además, le informó al médico que desde hacía tres días (desde el 28
de junio) padecía esos síntomas y que, anteriormente, había sufrido un cuadro
de amigdalitis crónica.
Sin
embargo, el médico del hospital le diagnosticó amigdalitis bacteriana y
faringitis, le formuló penicilina y antiinflamatorios,
y le ordenó la salida para la casa.
La
mujer no mejoró y, dos días después de que fue dada de alta en el Hospital de
Kennedy (3 de julio), fue al Cami Trinidad Galán para
que la atendieran, nuevamente, porque ya presentaba dificultad respiratoria,
seguía con la fiebre alta y el malestar general.
Dada
la gravedad del estado de salud de la paciente, ese mismo día el Cami la remitió al Hospital Tunal, donde notificaron que la
mujer era un caso probable del virus AH1N1, por lo cual ella quedó
hospitalizada. A las 5:35 de la tarde del día siguiente (4 de julio) la
mujer falleció.
La Comisión
de Vigilancia y Control visitó, también, el área dispuesta por el Hospital
Occidente de Kennedy para el recibo y atención de los pacientes sospechosos de
padecer la nueva gripa.
Esa
sección fue levantada en dos carpas, ubicadas en un parqueadero. Los
inspectores hallaron que una de ellas está dotada debidamente con los equipos
requeridos para dicha atención, mientras que la segunda carpa no cuenta con los
equipamentos necesarios.
Los
inspectores observaron que aun cuando dicha área especial cuenta con baños y
lavamos para los pacientes, carecía de toallas y jabón para el lavado de manos,
una de las recomendaciones más reiteradas para evitar el contagio con el virus
AH1N1.