No se asuste si su hijo se enferma cuando entre al jardín

Cuando los niños están enfermos, es aconsejable que no permanezcan en el jardín.

Enfermedades respiratorias, gastrointestinales y dérmicas, las más comunes en niños preescolares.

Es habitual que en el comienzo de la etapa escolar, los pequeños presenten infecciones y enfermedades. Y aunque para algunos padres esta situación es alarmante, el infectólogo pediatra e investigador Carlos Torres dice que es una etapa que todo niño debe vivir.

"El error de la gente es pensar que estas molestias son tan graves, que los niños nunca deben ir a un jardín porque se contagian. Y no es así. La socialización de un niño supera con creces a las infecciones, las cuales deben afrontarse, pero ser cuidadas en casa", afirma el especialista.

Las causas del contagio en las instituciones escolares están dadas por la edad del menor; hacia el año y medio de vida comienzan a desarrollar sus propias defensas y, mientras estas se fortalecen, pueden estar bajas. Además, existe una alta posibilidad de contagio, al tener contacto frecuente con sus pares.

Luis Jorge Hernández, epidemiólogo de la Secretaría Distrital de Salud de Bogotá, afirma que durante los meses de febrero y marzo aumentan casi en un 30 por ciento los casos de enfermedades en niños, sobre todo aquellas que son transmisibles. Época que coincide con el ingreso a las instituciones educativas.

Problemas comunes

Las enfermedades respiratorias son las más frecuentes, en especial el resfriado común. Un niño menor de 5 años sufre entre 8 a 12 episodios de estos al año, señala el doctor Hernández.

"Se caracterizan por cuadros que duran entre 5 y 8 días, y se acompañan de sintomatología como fiebre, malestar general, dolor de garganta y abundante secreción nasal", señala Johana Hurtado Laverde, terapeuta respiratoria y docente de la Universidad Manuela Beltrán.

Por otra parte, están las infecciones del oído, la sinusitis, los problemas gastrointestinales y las infecciones dérmicas, como los piojos y la sarna. No solo el contacto piel a piel favorece la aparición de estos, también la presencia de virus, bacterias y parásitos en juguetes, útiles escolares y superficies.

Aunque la mayoría de las enfermedades que se adquieren son inevitables, es importante conocer algunas medidas para que la situación sea más llevadera.

El infectólogo dice que las enfermedades e infecciones son más graves durante los primeros 6 meses de permanecer en el jardín; menos peligrosas entre los 6 y 12 meses, y manejables después de un año. La mayoría de los casos se controlan; solo el 10 por ciento puede agravarse.

Para fortalecer el organismo cuide a sus hijos antes y durante la enfermedad

Tenga en cuenta las siguientes recomendaciones de los especialistas: Tener una  alimentación balanceada (evitar paquetes, dulces, galguerías). Tener el esquema  de vacunación al día. Permanecer aseado  (cuerpo, uñas, cabello, ropa). Lavar las  manos permanentemente. Mantenerlo  hidratado. Protegerlo  de los cambios de temperatura. Si el niño está  enfermo, cuidarlo en casa. Así, evita que se propague el virus.

Cuándo llevarlo al servicio de urgencias

Si se presentan las señales de alarma, no dude en acudir a la clínica.

Respiración rápida, tos, fiebre de más de dos días y silbidos en el pecho. Falta de apetito, vómito y convulsiones. Irritabilidad, ojos hundidos y llantos sin lágrimas.

Signos de dificultad respiratoria.
Fosas nasales que se abren bastante para tratar de tomar aire, hundimiento de costillas y labios morados.

KAREN JOHANA SÁNCHEZ
REDACTORA ABC DEL BEBÉ