Ipod, celulares y mp3 afectan oídos de niños

Aparatos como Mp3, ipod y celulares están causando problemas auditivos en los niños y adolescentes de Cali. Así lo revelan especialistas en el tema, quienes precisan que por lo menos el 10% de los menores de la ciudad está presentando algún tipo de alteración en su salud por esta causa, a la que se suma el ruido cotidiano en las calles.

Los expertos aseguran que de cada diez consultas por problemas auditivos, al menos tres corresponde a menores de 17 años. Asimismo, se precisa que de cada tres adolescentes entre 13 y 17 años, dos usan alguno de los aparatos tecnológicos señalados.

Ángela López, doctora en audiología, advierte que “los menores de hoy, cuando lleguen a los 50 años, presentarán problemas de audición propios de personas de la tercera edad”.

López también afirma que en Cali lugares como la Calle Quinta y la terminal de transportes son puntos de alta contaminación auditiva.
Además, señala la médica, en los hogares no existe una higiene auditiva adecuada, la cual debe estar marcada por el control de los niveles de volumen.

Pedro Blanco, otólogo, explica que “la exposición del oído a ruidos muy fuertes por tiempos prolongados se llama trauma acústico, lo que también depende de la frecuencia y la intensidad del sonido”.

Blanco dice que debido al volumen excesivo es común poder escuchar la música que está oyendo un joven que usa audífonos. “En este caso el problema se va a presentar a futuro, si el joven escucha música todos los días entre cuatro y seis horas a un volumen muy alto”, añade.

Casos y recomendaciones

Las consultas de este tipo de especialistas han evidenciado en Cali recurrentes casos de trauma acústico, generados en situaciones donde los niños y adolescentes se ven implicados.

En la Calle Quinta, relata el doctor Blanco, se sabe de habitantes del sector que por evitar el ruido de la calle le suben al máximo el volumen al equipo de sonido, generando un daño no sólo a sí mismos sino a sus familias y vecinos.

Otro de los casos se presenta en el centro de la ciudad, donde hay fuerte bullicio por periodos hasta de ocho horas, debido a la gran cantidad de personas hablando y a vendedores haciendo perifoneo. Las personas en esta situación van a presentar una perdida auditiva con el pasar de los años, precisa Blanco.

La doctora López añade que “los menores afectados por el ruido están presentando otro tipo de trastornos, como alteraciones del sueño y en el ritmo respiratorio, taquicardia, náuseas y cefaleas”.

Los males auditivos en menores fue el tema principal de un encuentro que tuvo lugar ayer en el Centro Médico Imbanaco, denominado ‘Cómo identificar de manera temprana la pérdida auditiva y cómo evitarla’. Algunas de las recomendaciones fueron bajar el volumen de la televisión, el equipo de sonido, altavoces del ordenador y no regalar juguetes ruidosos a los niños. Asimismo, delimitar el tiempo que el niño pasa en entornos ruidosos.