Por primera vez, un
equipo de científicos de la Universidad de Salud y Ciencia de Oregon y el Centro Nacional de Investigación de Primates,
ambos de Estados Unidos, logró obtener células madre embrionarias capaces de
convertirse en cualquier otro tipo de célula del organismo, a partir de la piel
humana.
Hasta ahora, la
única forma de obtener estas células era extrayéndolas de un embrión humano,
varios días después de haber sido fertilizado, en un proceso que implicaba la
destrucción del embrión.
El avance, publicado
en la edición en Internet de la revista Cell, ya es considerado un hito dentro de los procesos de
clonación reproductiva, razón por la cual despierta toda clase de opiniones y
controversia.
Para llegar a este
resultado, el grupo de científicos, encabezado por Shoukhrat
Mitalipov y Paula Amato,
utilizaron una variante del método del investigador escocés Ian Wilbut, para crear la famosa oveja Dolly, el primer animal
clonado del planeta.
Estos tomaron una
célula de la piel de un adulto, le extrajeron el núcleo (que contiene el ADN o
información genética del individuo) y lo trasplantaron en un óvulo, al que
previamente se le extrajo también su núcleo.
De este modo, el
óvulo se ‘fertiliza’ con el núcleo de la célula de la piel; luego se permite su
desarrollo por unos días, hasta que desarrolle células capaces de convertirse
en cualquier tipo de tejido.
De acuerdo con Mitalipov, “nuestro hallazgo ofrece nuevas formas de
generar células y tejidos para pacientes con lesiones en cualquier órgano
disfuncional o dañado”, e insiste en que “es un paso muy grande para aliviar
enfermedades que afectan a millones de personas”.
Las células obtenidas mediante esta técnica son más
confiables, toda vez que se apartan de los riesgos que conlleva producir
células de estas características, a través de procesos de inducción con virus,
porque pueden generar mutaciones.
La investigación ha
demostrado que las células que se obtienen a partir de estos embriones
fertilizados no tenían anomalías cromosómicas, la actividad de sus genes era
normal y contaban con la capacidad de convertirse, sin limitación, en células
especializadas que fácilmente pueden utilizarse, de manera segura, en los
procesos de terapia celular. En este campo entran el cultivo de células para
remplazar piel en personas quemadas o con déficit en otros órganos.
Debate ético
Aunque esta técnica
no utiliza directamente embriones humanos, poco después de
anunciarse el avance, surgieron voces en contra que despertaron un viejo debate
en el que se mezclan aspectos éticos y científicos.
Según David
Prentice, del Family Research
Group, el material obtenido a través de la técnica “ya es un embrión al cual se
le deja desarrollar por unos días y luego se le destruye (…) El problema ético
es la creación de vida humana específicamente para destruirla en estos
experimentos”.
A esto se suma otro
temor: que el embrión no se destruya para obtener células madre, sino que se
implante en un útero, para que crezca como ocurrió con Dolly.
Al respecto, Mitalipov considera que esta técnica, que demuestra en la
práctica la posibilidad de hacer una clonación con fines terapéuticos, “es
improbable que permita la clonación de seres humanos, lo que se conoce como
clonación reproductiva, porque se ha demostrado en monos que dichos embriones
no son viables con ese objetivo. Los avances que se producen en el campo de la
transferencia nuclear siempre despertarán un debate público sobre la ética de
la clonación humana, y este no es nuestro objetivo ”.
Tadeiusz Pacholczyk,
director del Centro de Bioética Católica Nacional (Filadelfia), no mostró
extrañeza ante el hallazgo y aseguró: “Todo el mundo estaba esperando que este
día llegara; debería ser la solución para las objeciones morales planteadas
durante años”.
¿Qué son células madre?
La característica
principal de estas células es que pueden dar origen a diversos tipo de tejidos, entre ellos muscular, nervioso y óseo.
¿Qué tipos hay?
Las pluripotenciales, que tienen la capacidad de derivarse en
tejidos u órganos específicos (adultas), y las totipotenciales
(embrionarias), que pueden originar un individuo completo.
¿Dónde se encuentran?
A los cinco días de
crecimiento de un óvulo fertilizado se encuentran entre 150 y 200 células que
son multipotentes en su mayoría. También pueden
extraerse del cordón umbilical, de algunos tejidos de adultos (como la sangre
periférica y la médula ósea) y cuando se reprograman a partir de células
normales.
¿Qué es la clonación terapéutica?
Es el resultado
obtenido con la técnica de los científicos de EE. UU.
‘Un avance excelente, pero aún falta’
El genetista
colombiano Emilio Yunis Turbay,
una de las máximas autoridades en este campo en América Latina, calificó el avance de los
investigadores estadounidenses como “muy grande, pues es la primera vez que se
logra en humanos”.
De acuerdo con Yunis, la técnica, que fue creada por el escocés Ian Wilmut y con la cual clonó a la oveja Dolly, “adquiere
ahora una dimensión práctica real frente a la posibilidad de crear tejidos y
órganos para enfrentar enfermedades. Hasta ahora no se había pasado ni del campo
teórico ni de los modelos animales”.
El genetista explicó
que con base en este desarrollo podrían fabricarse las tres líneas embrionarias
que serían capaces de originar cualquier órgano, “y esto es excelente, las
perspectivas son enormes”.
Aclara, sin embargo,
que pese a tratarse de un gran paso, es necesario ser prudentes, “pues todavía son
necesarios nuevos desarrollos para darles aplicación práctica y terapéutica”.
Frente al debate
ético generado, Yunis aclaró que ve con buenos ojos
la clonación terapéutica, mas no la reproductiva: “Esto en realidad abre
las puertas para la clonación humana, porque solo bastaría con implantar el óvulo fertilizado con
el ADN de la célula de la piel, para que se desarrolle un organismo completo”.
Historia de la clonación
1952: los estadounidenses Robert Briggs y Thomas King implantaron el
núcleo de un embrión de rana en un óvulo de la misma especie. El embrión no se
desarrolló.
1984: el danés Steen Willadsen anuncia la
primera clonación de una oveja a partir de células embrionarias. Se reprodujo
en cabras, cerdos, conejos y monos.
1994: el estadounidense Neal First clona cuatro terneros a partir de células extraídas
de embriones.
1996: el escocés Ian Wilmut transfirió una
célula de embrión de cordero a un óvulo de oveja.
1997: Wilmut anuncia el nacimien- to de la oveja Dolly, primer clon de un mamífero adulto
producido a partir de una célula adulta extraída de la ubre de otra oveja.
1998: en EE. UU. se anuncia la clonación de
los dos primeros terneros transgénicos.
1998: científicos surcoreanos anuncian haber clonado un embrión
humano a partir de células adultas de una mujer.
1999: en EE. UU. clonan un embrión humano
utilizando métodos idénticos a los de la oveja Dolly.
2005: científicos de EE. UU. lograron
obtener células madre, pero no a partir de un embrión sino de células somáticas
de la piel.
2011: en Argentina se clona por primera vez una vaca capaz de
producir leche maternizada.
REDACCIÓN SALUD