Los verdaderos riesgos que entraña la picadura de abejas y avispas no son el
dolor o la inflamación, sino las reacciones alérgicas –que en algunos casos
pueden ser mortales– y las infecciones, que son más frecuentes y menos graves.
Aunque la mayoría de estos eventos sólo provocan molestias ligeras, hay
personas que pueden resultar muy afectadas, sobre todo por abejas.
Ojo a los síntomas Una picadura puede, en general, causar síntomas como
dolor, hinchazón, enrojecimiento, comezón, calor y ronchas en el lugar
afectado. Y si bien buena parte de estos eventos no pasa de ahí, lo mejor es
estar atentos siempre a la aparición de reacciones alérgicas más serias, que
pueden poner en peligro la vida.
La idea es acudir de inmediato a urgencias si se presentan síntomas como
tos, cosquilleo en la garganta, opresión en la garganta o en el pecho,
problemas para respirar o silbidos, náusea o vómito, mareo o desmayo,
sudoración, ansiedad, brotes y picazón en otro lugar del cuerpo, distanciado del
lugar de la picadura ¿Cómo actuar en estos casos? El tratamiento específico de
las picaduras de abejas y avispas será determinado por el médico.
No obstante, vale tener en cuenta que si la picadura ocurre en la boca, la
nariz o la zona de la garganta es urgente buscar atención hospitalaria, pues la
hinchazón puede cerrar las vías respiratorias. Consulte también si se presenta
uno solo de los síntomas generalizados descritos.
Si la reacción sólo se presenta en el sitio de la picadura, se pueden poner
en práctica las siguientes medidas: Tranquilice a la persona y extraiga el
aguijón raspando suavemente el lugar de la picadura con un objeto romo, como
una tarjeta de crédito o un cuchillo sin filo.
No intente apretar para extraer el aguijón, porque podría liberar más
veneno.
Lave bien la zona con agua y jabón.
Aplique frío o una bolsa de hielo envuelta en un trapo para ayudar a reducir
la hinchazón y el dolor (ponga el hielo durante diez minutos y después retírelo
otros 10, por unos 30 a 60 minutos).
Si la picadura es en un brazo o en una pierna, eleve el miembro para ayudar
a reducir la hinchazón.
Si tiene comezón aplique una pasta de bicarbonato de sodio con agua, y
déjela sobre la picadura de 15 a 20 minutos. Si no tiene, haga una pasta con
ablandador de carne y agua y déjela sobre la picadura durante 15 a 20 minutos.
Ponga una bolsa de té mojada sobre la picadura, durante 15 ó 20 minutos.
Si tiene a la mano una crema con antihistamínicos o corticosteroides,
o loción de calamina, aplíquela.
Observe atentamente a la persona durante una hora, por si aparece algún
síntoma de reacción alérgica que justifique un tratamiento urgente.
¿Y si se trata de alacranes? Estos animales, que pertenecen a la familia de
las arañas, pasan la mayor parte del día en lugares sombríos: debajo de
piedras, maderas, escombros y lugares húmedos. En la noche salen a cazar
insectos y arañas, que se convertirán en su alimento.
En Colombia se encuentran en todo el territorio, especialmente en zonas
cálidas desérticas, semidesérticas y montañosas.
La picadura de un alacrán deja una lesión usualmente colorada, que puede
infectarse si no se cuida.
Hay que recordar que personas con antecedentes de alergia a picaduras o
mordeduras de insectos o arañas, deben ser más cuidadosas, pues pueden desarrollar
una reacción adversa más importante.
¿Qué hacer? No succione la herida. Lave el sitio de la picadura con agua y
jabón y aplique hielo. Si nota la aparición de dificultades respiratorias,
enrojecimiento del cuerpo o somnolencia, busque ayuda médica.
FUENTE: MARÍA FRANCISCA OLARTE, MD, TOXICÓLOGA CLÍNICA.
¿CÓMO EVITARLAS? .
No use perfumes, lacas y otros productos olorosos que atraiga a mosquitos.
No camine descalzo.
Vaporice la ropa con un repelente.
Evite lugares en los que haya colmenas o avisperos.
Si un insecto se acerca, cálmese y aléjese despacio.
Si tiene antecedentes de alergia, consulte con un alergólogo para que le
haga las pruebas del caso y le indique qué debe tener siempre a la mano para
sortear picaduras.
Viajeros: a cuidarse del dengue.
En lo que va corrido del año, las Secretarías Departamentales de Salud han
reportado al Instituto Nacional de Salud cerca de 40 mil casos de dengue,
incluidos 39 fallecimientos.
Con el propósito de evitar la diseminación de esta enfermedad (que se
transmite a través de la picadura de un mosquito), las autoridades de salud
recomiendan a todos los viajeros que se desplazan hacia zonas cálidas en Semana
Santa, tomar medidas sencillas para reducir el riesgo.
Entre ellas se cuentan el uso, en horas de mayor riesgo para la picadura de
mosquitos (después de las 4 p.m.), de camisas y pantalones de manga larga, que
cubran las áreas del cuerpo más expuestas.
También se aconseja la aplicación de repelentes cada cuatro horas en
tobillos, muñecas y cuello; dormir con toldillos impregnados de insecticida, y
usar ventiladores y mallas de trama fina en las ventanas.
Quienes al regreso de zonas donde existe el mosquito transmisor presenten
fiebre, dolor de cabeza, malestar general, dolor abdominal y vómito deben
indicarle al médico el antecente de desplazamiento,
que es clave para la sospecha de la enfermedad.
‘‘Las abejas causan la mayoría de las reacciones alérgicas por insectos en
Colombia”.
María Francisca Olarte, MD, toxicóloga clínica