El HUV vive otra agonía

Los médicos dicen no tener herramientas para atender a los pacientes.

Cada día se mueren tres personas en la unidad de medicina interna del Hospital Universitario del Valle, HUV, porque no reciben atención ya que no hay disponibilidad de recursos. En la unidad de trauma la situación es similar: allí se muere una persona diaria.

Y en urgencias, donde la causa más frecuente de consulta es el infarto, no hay cómo hacer un electrocardiograma, cateterismos y lo peor, ni siquiera se consigue una hoja de papel.

La situación fue denunciada ayer por los médicos de la institución, que aprovecharon la celebración del Día Panamericano del Médico para revelar la crítica situación que atraviesa el importante centro de salud.

Laureano Quintero, médico del HUV y subdirector de la Unidad de Trauma, indicó que todas estas muertes que se presentan en las unidades de atención son totalmente prevenibles.

“Estamos en una crisis tan grave que los pasillos mantienen totalmente llenos, no hay salas de espera ni camas y la gente se madruga a las 4:00 a.m. para que les den una cita médica en un mes. He tenido casos como el de un niño que sufrió una quemadura y sólo 17 horas después fue operado”, dijo.

A su turno, el médico Adolfo González mostró su consternación con una vivencia propia. “En unos de mis turnos del fin de semana sucedió que se me murieron tres pacientes por hemorragia digestiva alta pues no había como hacerles una endoscopia. Son muertes evitables. También tuve pacientes con cálculos, a quienes no fue posible hacerles un examen y le tocó al hospital conseguirlo por fuera. Muchos operamos sin exámenes previos, pues tenemos es que salvar a los pacientes”, explicó.

El médico resaltó que de cada tres pacientes atendidos, dos son del régimen subsidiado y uno del contributivo, por lo que los recursos cada vez son más escasos. “Pero lo que más nos duele es que la Gobernación se gaste más de $12.000 millones en publicidad y nosotros mendigando exámenes y con pacientes muertos”, reiteró a la vez que criticó la gestión de la Alcaldía de Cali, pues el 70% de los pacientes provienen de esta ciudad, “pero desde este gobierno no se aporta nada”.

Toda esta situación, según el médico Seney Salazar, cirujano y docente de la Univalle, ha desencadenado una fuga masiva de talentos. “Esto se da por el tipo de vinculaciones que está haciendo el hospital y por que los salarios no son equitativos. Las empresas privadas de salud están ofreciendo mejores salarios. Además, la falta de elementos de trabajo para brindarle una atención óptima a los pacientes aburre a muchos”, explicó.

También reveló que en dos años y medio, en la unidad de cuidados intensivos del HUV se han ido 50 médicos.

Raúl Astudillo, cirujano pediátrico y también profesor de la Univalle, insistió en que el HUV se quedó como un dinosaurio. “No podemos seguir a la antigua, sin sistematización ni tecnología. Hace muchos años el HUV era pionero, pero está abandonado, le falta mucha más calidad en la atención”, dijo, por lo que propuso a las directivas analizar la posibilidad de que la Univalle asuma nuevamente la administración del HUV, para que así recupere su viabilidad.

Orlando García, asesor jurídico del HUV, y quien asistió en representación de la directora María Lucero Urriago, afirmó que el problema de la entidad es de recursos y esto tiene su origen en el sistema político administrativo que tiene el país. “El hospital siempre, históricamente, ha tenido la mentalidad de cómo va a pasar el año y queda pensando qué va a hacer para el otro”, dijo. A la vez , dejó claro que aunque el presupuesto del 2010 sufrirá una reducción, la entidad ya le pidió al Gobierno Nacional y al Departamental una adición. “Es una situación que se sale del manejo y el control de la dirección de la entidad”, afirmó.

Del mismo modo, dijo que la entidad ya sustentó ante el Gobierno Nacional los excedentes de facturación y aspira a recibir el próximo año, por este concepto, unos $12.000 millones. También, que el próximo año se llevarán a cabo contratos de apoyo tecnológico y mejoramiento en la prestación del servicio.

García dijo que cuando el Gobierno decrete el estado social de emergencia, el Hospital aspira a recibir más recursos.

Los porcentajes

38% de las denuncias contra los médicos son de responsabilidad ética.

17% de las denuncias hechas en el país están en el Valle.

Sobrecupo

·  Los médicos insistieron que el sobrecupo en la entidad es permanente.

·  “Hay áreas con capacidad para 45 pacientes, pero manejamos hasta 120. Y lo peor es que aún tenemos camillas sin colchonetas, sin barandas, y así es muy difícil prestar un buen servicio”, afirmó el médico Seney Salazar.