Diez pautas para que conozca y
sepa cómo tratar el glaucoma
Aunque
se puede presentar a cualquier edad, este mal es más común después de los 40
años.
Este
mal es la principal causa de ceguera irreversible en Colombia y en el mundo.
Es
la enfermedad más frecuente del nervio óptico, que se atrofia en forma aguda o
crónica y que sin tratamiento puede conducir a la pérdida de la visión. Uno de
sus peores aspectos es que al comienzo cursa sin síntomas: en países
desarrollados la mitad de los afectados ignoran que la tienen, y en naciones en
vías de desarrollo la cifra alcanza el 90 por ciento.
Estas
son diez claves para conocer más esta enfermedad.
Por
qué 'glaucoma'
Los
médicos griegos de la antigüedad denominaron así a este mal, al observar que
algunos ciegos tenían un color gris verdoso en las pupilas, que en griego se
llama glaucos. De allí se deriva el término 'glaucoma'.
Qué
es el nervio óptico
Las
fibras nerviosas de la retina que llevan la información visual a la corteza
cerebral, se juntan para conformar el nervio óptico; este es el 'cable' que
conecta al ojo con el cerebro, en donde percibimos las sensaciones visuales.
Por
qué ocurre
La
mayoría de los casos son de origen genético (glaucoma primario). Un número
menor son fruto de males de los ojos, enfermedades sistémicas como la diabetes,
uso de corticoides y traumatismos (glaucomas secundarios).
Cuántos
tipos hay
Son
tres grupos principales: los glaucomas primarios, los secundarios y los
glaucomas congénitos y de la infancia; de estos últimos un signo importante
serían los ojos muy grandes en los niños afectados.
Qué
daña al nervio
La
causa principal es la alta presión intraocular. Ocurre cuando el sistema de
drenaje del ojo se tapa, impidiendo la salida de fluido. Eso aumenta la presión
dentro del ojo, lo que causa, progresivamente, el daño del nervio óptico.
Quiénes
están en mayor riesgo
Las
personas con antecedente familiar de glaucoma tienen un riesgo más alto de
desarrollarlo; también la población latina y de raza negra; es más frecuente en
mayores de 40 años, de igual modo en miopes, diabéticos y personas que usan
corticoides por largos periodos.
Cuáles
son los síntomas de este mal
Solo
los glaucomas agudos producen síntomas claros, que son dolor, enrojecimiento y
disminución súbita y severa de la visión. Los crónicos, que son la mayoría,
suelen ser asintomáticos: una persona puede estar ad
portas de la ceguera sin notar alteraciones en su visión.
Una
ceguera evitable
Cuando
se detecta a tiempo se puede prevenir o controlar la progresión del daño y, por
lo tanto, la ceguera. Por eso es vital la consulta periódica con el
oftalmólogo, y más si se tiene alguno de los factores de riesgo. Es importante
no automedicarse, pues algunos 'colirios' con corticoides pueden empeorar la
situación.
Por
qué no se nota al comienzo
Porque
las personas afectadas pierden primero su campo visual periférico, pero ven con
claridad en el área central. Con frecuencia solo llegan a darse cuenta de que
algo anda mal cuando la nitidez de la visión (agudeza visual) disminuye. Para
ese momento el daño ya está muy avanzado.
Cómo
se trata
Detectado
el problema, la primera línea de acción puede ser el uso de medicamentos, la
mayoría en colirios. Si el tratamiento es insuficiente, se recurre a
procedimientos con láser o a cirugía (la idea es establecer nuevas rutas para
el líquido intraocular). Hoy todos los tratamientos buscan reducir la presión intraocular.
Algunas
pruebas que se requieren
Para
llegar al diagnóstico de glaucoma es necesaria la práctica de exámenes, como la
toma de presión intraocular, prueba del campo visual, evaluación del fondo del
ojo y evaluación de cámara anterior (para determinar el riesgo de obstrucción
del sistema de drenaje dentro del ojo).
Gabriel
Ortiz habla sobre la conjuntivitis y sus causas. http://bit.ly/ifUxHh.
GABRIEL
ENRIQUE ORTIZ
MD Oftalmólogo, jefe de
Par