'A mí me achacaron un falso
positivo', dice la tiroides
Estuvo
en la palestra por el supuesto cáncer de la Presidenta argentina. "Yo rara
vez molesto".
"No
estoy molestando a la presidenta Cristina Fernández de Kirchner;
no sé quién resultó con ese cuento", aclara la glándula tiroides, que le
atribuye su recién ganada popularidad al supuesto cáncer de la mandataria de
Argentina.
"Los peronistas de ese país, claro, me miran mal, me echan la culpa de
querer sacarla de circulación. La verdad, eso no me inquieta: soy un órgano
apolítico", dice.
¿Lo
de la Presidenta no era un cáncer de los suyos?
No.
Lo de doña Cristina resultaron ser nódulos o bolitas en mis dos lóbulos, que
inicialmente confundieron con cáncer. Fue un falso positivo que solo se
presenta en el 2 por ciento de los casos. De buenas ella...
Aun
así, la sacaron del cuerpo de la Presidenta...
Así
es. Me extirparon de su cuerpo y me mandaron a patología; cuando me examinaron
se dieron cuenta de que no tenía células malignas. Lástima, porque ya no ayudo
a gobernar a los argentinos. Ahora tendrá que tomar mis hormonas para suplirme.
No se estará dando mucha importancia. ¿En realidad quién es usted?
Soy una glándula en forma de corbatín; habito en el cuello, por debajo de la
manzana de Adán y delante del cartílago cricoides, que llaman.
Si
es una glándula, produce cosas. ¿Qué fabrica usted?
Veo
que ha aprendido. Mire, elaboro la triyodotironina y
la tiroxina, más conocidas como T3 y T4. Esas son las hormonas tiroideas. Para
eso necesito yodo y, como el cuerpo no lo produce, usted tiene que
suministrármelo con lo que se come. Sin eso no se vive. Mejor dicho, sin yodo
no hay paraíso.
¿Cómo
es eso?
Resulta
que soy como el director de orquesta en el cuerpo. Mis hormonas son las que les
dan el ritmo de funcionamiento a todos los órganos. Para que me entienda, ellas
hacen que el cuerpo vaya en las revoluciones exactas. Si hay demasiadas, todo
se acelera y si escasean, todo se lentifica. A lo primero ustedes, los médicos,
le dicen hipertiroidismo y a lo segundo, hipotiroidismo.
Eso
suena importante, pero no me queda claro qué es lo que en verdad hace...
Veo que su metabolismo es lento. Mire, yo determino el crecimiento y el
desarrollo de las funciones cerebrales y musculares; regulo la temperatura y el
consumo de oxígeno; estimulo la producción de proteínas, la degradación de las
grasas y el consumo de azúcar; intervengo en el uso del agua, de las vitaminas
y en muchas más cosas.
¿Por
qué la culpan de la gordura de la gente?
Ese
bacalao me lo cargan porque cuando funciono lentamente se acumula cierto tipo
de grasa. Pero entre los gorditos, esos son los menos...
Aparte
de cáncer, ¿de qué más se enferma?
Aclaro,
puedo enfermarme de tres tipos de cáncer: el papilar, que es poco agresivo, y
el folicular y el indiferenciado, que son más complicados. También hay cosas
que me inflaman (esa es la tiroiditis) y cuando la gente no come yodo, pues
protesto y me agrando mucho, formando el bocio o coto. ¡Y en Colombia sí que
hay cotudos, por Dios!
¿Quiere
decir algo más?
Sí,
que ojalá dejen de inventarme males y de hablar de mí
sin antes hacerse un examen. Soy una glándula muy noble, modestia aparte, y
molesto poco, así que déjenme quietica.
CARLOS
F. FERNÁNDEZ- ASESOR MÉDICO DE EL TIEMPO