Esencias florales y cromoterapia ayudan a controlar las emociones

Vea las propiedades de algunas flores y algunos colores que le pueden servir.

La aromaterapia, unida a las sensaciones que despiertan los colores, es parte de lo que Mónica Verdier de Pérez denomina como 'aromacolorterapia'.

"Se trata de la integración de fragancias y colores que en forma de aceites, aplicados en los puntos energéticos, tienen propiedades relajantes, entre otras", dice Verdier, presidenta de Universo Garden Angels, compañía argentina que llega a Colombia.

Por ejemplo, explica la doctora Gabriela Paz, experta en el tema, "algunas de las propiedades de las plantas calman temores, estimulan la concentración e incrementa la energía positiva".

Añade que los aceites aromáticos, en colores, se aplican en puntos energéticos como las muñecas, las plantas de los pies, el pecho y el vientre.

"De inmediato, el aroma será percibido por el sistema olfativo, que tiene reacciones inmediatas", concluye Paz.

Test del color

Escoja el color que más le llama la atención.

Magenta: Se relaciona con personas que están en cambio profundo. Se puede escoger en momentos de falta de inspiración.

Violeta: Significa que es una persona intuitiva. Es un tono tranquilizador que ayuda a calmar las obsesiones. Sirve en momentos de inestabilidad emocional.

Azul: Tiene que ver con las personas que valoran la verdad y la justicia. Ayuda a la relajación corporal y a encontrar calma. También ejerce un efecto sedante que permite conectarse con la parte intuitiva.

Turquesa: Suele ser escogido por quienes tienen buena imaginación y son innovadores. Se recomienda para momentos de tensión mental y para superar sensaciones de inseguridad.

Rosa: Es el color de quienes se preocupan por el bienestar emocional de los demás. Al elegirlo se disminuye la sensación de irritación y brinda protección.

Amarillo: Significa una búsqueda constante de nueva información. Además, ayuda a levantar el ánimo, potencia la confianza en uno mismo y refuerza la capacidad de aprendizaje.

Naranja: Identifica a las personas alegres y sociables. Ideal para liberar presiones. Además, otorga fuerza física y estimula la sensualidad. 
 
Propiedades de los aceites florales

Jazmín: Aumenta la receptividad.

Lavanda: Ideal para personas nerviosas e inquietas. Brinda calma.

Limón: Estimula el sistema nervioso y ayuda a aclarar las ideas.

Iris: Para los momentos en que se necesita inspiración y creatividad.

Nogal: Sirve para quienes pasan por un proceso de transición y renovación.

Roble: Se recomienda para quienes no pueden descansar.

Sábila: Se puede usar en estados de agotamiento y extremo cansancio.

Alhelí: Ideal para quienes se culpan constantemente por sus errores.

Gentian: Útil en casos de depresión.