AFP. ¿Piratear aparatos médicos? No es pura ficción y los expertos
estadounidenses opinan que la amenaza es seria, con objetivos que van desde los
marcapasos a la bomba de insulina, y que sus consecuencias pueden ser mortales.
La Food and Drug Administration (FDA), organismo encargado de la seguridad
de alimentos y medicamentos en Estados Unidos, acaba de recomendar una mayor
vigilancia a los fabricantes. Está preocupada por las vulnerabilidades en
materia de ciberseguridad que podrían afectar
directamente a los aparatos médicos o a las redes de los hospitales. El
escenario futuro ya fue contemplado en la televisión: en la serie Homeland asesinan al vicepresidente de Estados Unidos
interviniendo en su marcapasos y desencadenando un choque eléctrico letal.
"La buena noticia es que no tenemos conocimiento de ningún accidente
en el mundo real. Pero la mala noticia es que no hay nadie científicamente
interesado en el tema", comenta Kevin Fu, profesor de informática de la
universidad de Michigan, especializado en el ámbito de la salud. Kevin Fu es
coautor de un estudio de 2008, que destacaba los riesgos de artefactos
implantados en el cuerpo humano, como los desfibriladores
cardíacos, ya que los piratas pueden reprogramarlos infiltrándose en las redes
inalámbricas que sirven para dirigirlos. Para él, sin embargo, "el mayor
riesgo es un virus que entre por accidente en un aparato médico antes que los
ataques imaginados en la ficción".
Desde una distancia de 10 a 15 metros, "puedo recuperar los códigos
necesarios para interrogar los implantes individuales a distancia", afirma
otro experto en seguridad informática, Jay Radcliffe.
Publicación
eltiempo.com
Sección
Otros
Fecha de publicación
25 de
junio de 2013
Autor
JOSGAR