“El país romperá los desequilibrios que tiene en ciencia”

ago. 10 de 2013

Por: Sandra Uribe Pérez, Unimedios

Paula Marcela Arias, ingeniera industrial de la Universidad Nacional de Colombia y actual directora de Colciencias, dialogó con UN Periódico acerca del Sistema Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación (CTeI). Entre otros aspectos, anunció una pronta discusión académica sobre la recalificación de las revistas indexadas y la recategorización de grupos.

UN Periódico: ¿De qué manera los proyectos de regalías responden a la visión general y al plan a largo término del Sistema de CTeI?


Paula Arias: Hay una cosa que puede ser confusa y es pensar que puede haber una sola visión de país. Hay regiones absolutamente distintas entre sí, con niveles de desarrollo y necesidades totalmente diferentes. Un sistema exitoso tendría que incorporar todas esas visiones y necesidades. En la medida en que las regalías están atendiendo necesidades definidas desde las regiones y poniendo unas capacidades que se han construido en la Universidad Nacional, creo que puede ser totalmente coherente con lo que el país necesita.

UN P: ¿En qué medida las becas doctorales están cubiertas por recursos diferentes a los de Colciencias?

P. A.: Las becas están cubiertas por el Presupuesto Nacional, como ha sido siempre. Creo que la suma para este año es de 195 mil millones de pesos en total, para 615 becas nacionales e internacionales.

UN P: ¿Cómo formar investigadores con la certeza de que tendrán la oportunidad de ejercer como tales?

P. A.: Los fondos que todos los años pone la nación garantizan la formación completa de los doctores. En los últimos meses hubo mucha confusión de gente diciendo “es que yo me fui al extranjero y me dejaron botado”. Yo creo que era más bien con ánimo de armar debate porque siempre se le asegura a una persona el proceso doctoral completo. Ni más faltaba que a alguien lo vamos a dejar tirado. Ha sido así desde el primer día que se creó el programa hace cinco años.

La certeza de obtener recursos para investigación la define la capacidad de gestión y la calidad de los proyectos que desarrolle el doctor. En la UN le podrán decir que los buenos investigadores siempre tienen fondos para investigación. Los que se quejan porque no les dan, seguramente tendrán dificultades por otras razones.

En el mundo entero los fondos son ilimitados. Conozco investigadores en la UN y en otras instituciones que acceden permanentemente a fondos, por ejemplo, de la Unión Europea, de los grants que ofrece la Fundación Bill & Melinda Gates, y de una cantidad de fuentes, pero porque presentan buenos proyectos. No es el papel de Colciencias asegurarle a nadie los fondos, sino asegurar que los buenos proyectos estén fondeados, eso sí.

UN P: ¿Por qué desapareció la categorización de los grupos de investigación y ahora solo hay grupos reconocidos y registrados?

P. A.: No es que no existan sino que el proceso está en ajuste. Por ahora, hay nuevos grupos que entraron y no han sido categorizados. Lo importante es si están reconocidos. Valga la oportunidad para anunciar que en los próximos dos meses saldremos con dos temas de discusión muy importantes en lo académico: uno, el de la recalificación de las revistas indexadas, cómo va a ser ese nuevo esquema; y dos, el de recategorización de grupos, en el cual ya hay un trabajo de más de dos años sobre un nuevo esquema de clasificación. Estamos listos para sacarlos a la luz pública, para que a través del trabajo consensuado y serio con las distintas universidades logremos llegar a un modelo que satisfaga a esa comunidad académica del país.

UN P: Usted dijo que su idea es que Colciencias sea “menos lenta” en sus procesos…

P. A.: Es la tarea que nos ha puesto el Presidente: modernizarnos. El objetivo de su Gobierno es construir un Estado moderno y nosotros somos los primeros en la lista, y eso implica muchas cosas: cambios y agilidad en los procesos, transformación de los sistemas de información internos, el proceso de reorganización de la planta y del crecimiento… Todo eso hace parte de la agenda de Presidencia de una Colciencias moderna.

UN P: ¿Qué piensa de la propuesta de una segunda “Misión de Sabios”?

P. A.: Tanto la Misión de Sabios como otras consultorías y consejerías que ha tenido Colciencias arrancaron de unos diagnósticos que siguen siendo totalmente válidos, porque el país todavía está rezagado en los temas de innovación y de investigación. Francamente, cualquiera de los diagnósticos puede servir, o no sirven si no somos capaces de ejecutarlos. A lo que el Presidente le apuesta hoy es a generar en Colciencias una enorme capacidad de ejecución. Entonces, una nueva Misión de Sabios podría ser interesante en un futuro, en el cual Colciencias se haya transformado como entidad y esté lista para ejecutar cualquier otra estrategia que venga. Ahora no lo veo.

UN P: ¿Cómo recoger los frutos de 45 años de trayectoria y hacer más visibles los resultados de investigación?

P. A.: El país ha invertido bastante desde la creación de Colciencias, pero en particular en los últimos diez años ha hecho una apuesta grande por invertir en ciencia y tecnología. Si bien no son los indicadores de los países más desarrollados, sí son esfuerzos muy importantes por ponerle recursos a la investigación.

Vale la pena hacer una revisión de cuáles han sido los resultados que el país ha obtenido a través de esas inversiones. Para eso hay dos vías: una es la de las publicaciones en ciencias básicas, en medicina y demás. Son las publicaciones de impacto las que definen si el avance alcanzado por esa masa crítica de investigadores colombianos ha sido relevante para el país y para el mundo.

La otra vía es la del desarrollo tecnológico. Será una nueva agenda que pondremos sobre la mesa y es ver cómo algunas de las investigaciones o avances tecnológicos de la comunidad científica podrán empujarse para llevarlos a nivel de desarrollo tecnológico, de modo que estén listos para transferirlos al mercado, vía innovación.

UN P: ¿Hacia dónde va el país en ciencia?

P. A.: Va hacia una explosión de las capacidades; es decir, vamos a dejar de tenerlas centralizadas solo en las capitales y en los departamentos desarrollados. En unos años, encontraremos unas regiones con mejor infraestructura y personas capacitadas para realizar proyectos de investigación y desarrollo pertinentes con las regiones. Eso nos puede dar una ventaja competitiva enorme frente a los países de la región que, por un lado, no tienen la diversidad biológica, cultural y demás que tiene este país; y, por otro, como casi todos los países subdesarrollados, tienen unas grandes desigualdades. Entonces, en ciencia, el país romperá los desequilibrios que tiene. Estoy segura de que para allá vamos.



Edición:

UN Periódico Impreso No. 169