Doble afiliación, otra de las
trampas al sistema de salud
Las
personas del régimen subsidiado que migran a EPS del contributivo terminan por
perder el derecho a los servicios, por tener doble afiliación.
EPS
del sistema contributivo afilian a personas del subsidiado, pero no les prestan
servicios.
La Superintendencia Nacional de Salud tiene bajo la lupa
una práctica mediante la cual algunas EPS del
régimen contributivo afilian, de manera irregular, a personas que ya son
beneficiarias del régimen subsidiado, para obtener las primas que el sistema de
salud les entrega por prestar servicios de salud.
De
acuerdo con denuncias aportadas por funcionarios de varias secretarías de salud
del país (especialmente de
Estos
buscan a potenciales afiliados entre quienes ya son beneficiarios del sistema
de salud, a través de EPS del régimen subsidiado. Dichos gestores, que se
presentan como funcionarios del gobierno, abordan a afiliados que
preferiblemente tengan núcleos familiares grandes y les ofrecen trasladarlos a
una EPS del contributivo.
No
sólo los convencen de que este régimen les ofrece servicios de salud más
amplios y una red de hospitales y clínicas que es mejor que la del subsidiado,
también les dicen que, contrario a lo que pasa con los demás afiliados a EPS
del contributivo, ellos no tienen que pagar nada. Los convencen de que el
Gobierno asume el pago mensual de sus cotizaciones.
¿En
qué consiste?
Según
las denuncias, un tercero (que se presume que es la propia EPS del contributivo
que pone en marcha la práctica) asume el pago de la cotización del nuevo
afiliado, que se calcula sobre un salario mínimo, como si se tratara de un
trabajador independiente (unos 64 mil pesos mensuales).
En
otras palabras, si todo el núcleo familiar está compuesto por cinco personas
(el cotizante y cuatro más),
En
teoría, el nuevo afiliado podría entonces recibir servicios de salud del
contributivo al que fue afiliado, pero eso no ocurre. Según las denuncias,
estas EPS recurren a prácticas como demorarles la entrega de los carnés durante
semanas y meses, documento sin los cuales no pueden ser atendidos.
Cuando
finalmente se los entregan, y los nuevos usuarios solicitan el servicio de
salud, se encuentran con que
En
ese estado de cosas, tampoco pueden recibir servicios de salud. En otras
palabras, las EPS del contributivo que recurren a esta práctica, reciben primas
(o UPC) del Fosyga por estas personas, a las que
nunca les prestan servicios.
Aunque
se investiga qué tan común es esta práctica y cuántos recursos de la salud se
han perdido gracias a ella, Cristian Sanjuán, ex secretario de salud de Soledad
(Atlántico), asegura que sólo en este municipio se pudo evidenciar el traslado
de cerca de 18 mil personas del subsidiado al contributivo.
Diez
mil casos en Barranquilla
Luis Alexander Moscoso, ex
secretario de salud de Barranquilla y actual alto consejero para la inversión
social, aseguró que también hubo dobles afiliaciones en esa ciudad, y que
ordenó investigar los casos que fueron detectados.
"Estos
mercaderes de la salud ahora tienen como blanco a los afiliados más pobres del
subsidiado, ojalá a la cabeza de núcleos familiares
grandes. Ellos le pagan al Estado el 12 por ciento de un salario
mínimo (unos 64 mil pesos), pero recobran una UPC por él y por cada miembro de
la familia", dice.
De
acuerdo con Moscoso, en
Moscoso
puso el caso en conocimiento de
'Hemos
seguido recibiendo denuncias': Supersalud
Así
mismo, el organismo de control investiga por multiafiliación
a las EPS Salud Colombia y Red Salud (quiere decir que tienen casos de usuarios
que siguen figurando en su base de datos, e incluso siguen recibiendo primas
por ellos, pese a que éstos decidieron afiliarse a otras EPS).
De
acuerdo con Conrado Gómez, superintendente Nacional de Salud, las
explicaciones dadas por estas empresas no solo no han sido satisfactorias, sino
que la Supersalud ha seguido recibiendo
denuncias sobre el tema.
Estos
casos, según Gómez, han llevado a la entidad a hacer seguimiento a las bases de
datos de afiliados a EPS del contributivo para detectar "incrementos
inusitados" que pudieran estar ligados a traslados irregulares.
En
Soledad, 18 mil personas fueron doblemente afiliadas
Soledad
(Atlántico) es, quizá, uno de los municipios donde con mayor descaro se llevó a
cabo en los últimos años una de las tantas modalidades de fraude al sistema de
salud en Colombia: la de la doble afiliación en el régimen subsidiado y en el
contributivo.
Prohibida
expresamente por
Según
denuncia el ex secretario de Salud de ese municipio, Cristian Sanjuán Bonilla,
cerca de 18 mil habitantes fueron engañados por "gestores pagados por esas
EPS" para firmar un papel en blanco y entregar una fotocopia de la cédula
de ciudadanía.
"Esos
engaños se daban sobre todo en diciembre, aprovechándose de las fiestas
navideñas. Los que nosotros documentamos y denunciamos ante las autoridades en
su momento se dieron casi todos a finales del
El
fraude operaba de esta forma: las EPS afiliaban al contributivo sólo al jefe
familiar y mientras pagaban la cotización de un solo afiliado, recibían luego
de una subcuenta de compensación del Fondo de
Solidaridad y Garantía (Fosyga) el equivalente a la
salud de todos los miembros de la familia (medida en UPC o Unidad de Pago por
Capitación).
Y
en ese municipio del Atlántico, como lo confirmó el ex funcionario, "en
promedio, cada familia está compuesta por seis o siete personas".
'No
es normal que hubiera 30 quejas diarias'
Sanjuán,
que estuvo casi cuatro años en el cargo y renunció en octubre pasado, asegura
que
Eso
se mezcló con miles de denuncias que empezaron a llegar a su oficina. "En
promedio, había unas 30 quejas por día. Eso no era normal, era evidente que
algo raro estaba pasando", explica.
Sucede que, en el momento en que muchas de esas personas que fueron engañadas
necesitaban utilizar el servicio, éste les era negado porque aparecían en las
bases de datos de los dos regímenes. En la mayoría de los casos, además, la
gente no sabía que había sido afiliada de manera fraudulenta al contributivo.
"A muchos les prometían juguetes o becas y en ningún momento les decían
que la fotocopia de su cédula fuera para eso", asegura
Sanjuán.
El
error de las EPS, dice el ex funcionario, es que no pensaron que buena parte de
las personas a las que engañaron fueran pacientes de alto costo, cuyas
enfermedades (cáncer, sida o problemas renales, entre otras) requieren de
tratamientos continuos.
"Hicieron
mal el cálculo. Creían que toda esa gente nunca iba a acudir a un centro de
salud y que no se iba a enfermar, pero no se percataron del número de pacientes
de alto costo que estaban afiliando de manera fraudulenta al
contributivo", señala.
Sanjuán
afirma que viajó directamente a Bogotá a radicar de manera formal la denuncia
de lo que estaba pasando en su municipio y que aquí lo recibieron el entonces
superintendente Nacional de Salud, Mario Mejía, y el que en ese momento era el
superintendente Delegado para
"El
fraude está comprobado pero para mí, lo más grave es que abusaron de la gente
más pobre, de los más vulnerables -dice el ex secretario-. En Soledad, cerca de
270 mil personas pertenecen a los estratos 1 y 2. Esto de la doble afiliación
lo hicieron en muchas partes del país, pero nuestro municipio es especialmente
vulnerable por su pobreza y también porque representa el 82 por ciento de la
población del Atlántico, sin contar a Barranquilla".
REDACCIÓN
SALUD