Aprenda cómo derrotar al estrés y
tener una vida más relajada en seis pasos
La española Beatriz Goyoaga
cuenta cómo halló la armonía sólo con respirar.
La
periodista madrileña Beatriz Goyoaga había alcanzado
grandes logros profesionales: fundó y dirigió una agencia de prensa que nutría
las páginas de 14 periódicos internacionales; cubrió las guerras del Líbano y
Afganistán y entrevistó a personalidades como la princesa Diana de Gales,
Nelson Mandela, el Dalai
Lama y George W. Bush.
"Estaba
feliz, pero me faltaba equilibrio", cuenta Beatriz. "Vivía como loca,
ocupada y estresada, con el cuello lleno de nudos (...) Cuando tenía un
sobresalto, me brotaba de herpes, no dormía. Me estaba matando".
Pero
un día su esposo, quien falleció hace cuatro años, la llevó a una charla de
Desde
hace 14 años se dedica a desestresar a ejecutivos,
funcionarios de gobiernos, reclusos de cárceles, habitantes de la calle, amas
de casa.
Con
sus cursos le ha ayudado a modificar los hábitos de vida a 37 mil personas.
Estuvo en Colombia, donde orientó a funcionarios del alto Gobierno y a altos
ejecutivos. Y recomendó algunas claves -sencillas y gratuitas- para sepultar el
estrés de una vez por todas.
1:
Libere su mente, viva el hoy y el ahora
Así
como se lava la ropa, el cuerpo y los dientes, también se puede lavar la mente.
Que usted no ande por ahí, ladrando; que no responda con un ladrido cuando
alguien le pida la hora.
Comprenda que el estrés no está en la empresa, la familia o la sociedad; usted
lo tiene por dentro.
Es
usted quien tiene que cambiar, nadie tiene que cambiar por usted; así que tome
la iniciativa. La vida es como el agua, se te va entre los dedos, a una
velocidad terrible y nadie garantiza que nos queden cinco días de existencia.
Nos podemos ir mañana. Viva el presente, no lo postergue, porque nadie se lo
garantiza.
¿Por qué hay que perder tanto tiempo en la vida haciéndose mala sangre?
2:
Aprenda a respirar y domine la mente
Respire
siempre profundo y largo, en cámara lenta. Use la respiración como un puente
entre el mundo interno del silencio y el mundo externo de la actividad, y así
podrá dominar la mente.
Acuda
a la respiración para encontrar la armonía que todos anhelamos; nadie quiere
estar estresado ni matándose la cabeza. Simplemente cierre los ojos, tómese el
tiempo necesario y sencillamente respire despacio. Luego, cambie el ritmo de la
respiración, ahora con la laringe; que suene como ronroneo de gato o como
caracola puesta en el oído. Nos acompaña toda la vida y desconocemos la
cantidad de secretos que tiene la respiración: puede, incluso, revertir
patrones de la mente.
3:
El valor del buen descanso y del ocio
La
gente se acuesta a las 3:00 de la mañana conectada a Internet y se levanta tres
horas después a trabajar, ya con el sistema nervioso agotado. O llegan a la
casa, se tiran en un sofá: ven televisión, leen el periódico y escuchan música
al mismo tiempo.
Entonces, la mente sigue galopando. El descanso es no tener ninguna actividad
intelectual y eso se logra no haciendo nada. Deles
espacio al ocio y a la serenidad. Aprenda a no hacer, literalmente, nada.
Aprenda
a ser más equilibrado, más feliz, con más capacidad de sonreír y con más
serenidad. Nada más. Aprenda también a estimular el hemisferio derecho del
cerebro, que es el del arte, la música y la creatividad: dibuje, toque algún
instrumento, escriba. La gente sólo suele estimular el hemisferio izquierdo,
que es el del razonamiento.
4:
En situaciones de estrés, sólo desconéctese
Contrólese,
no explote, así esté en una situación estresante y angustiosa, o tal vez de
ira.
Deje
el teléfono, el computador y lo que esté haciendo por -mínimo- tres minutos:
cierre los ojos, sólo respire y desconéctese. Si no sabe meditar, simplemente
respire profundamente. Aprenda a decir: "ya está, no más: estoy
saturado". Y ya verá cómo la mente, inmediatamente, empieza a serenarse.
Sólo el equilibrio y la serenidad dan la capacidad de enfrentarse al día día, a la cotidianidad. Así logrará dominar el estrés y
disfrutar de todas las actividades del trabajo, pese a las inevitables
presiones.
5:
Coma sano y disfrute de las cosas sencillas
La
alimentación sana, en porciones pequeñas, le darán al cuerpo el equilibrio
justo que necesita para que la mente esté liberada. No coma siempre lo mismo.
Hay que comer fresco, nada de sobras que quedan de otras comidas. Coma mucha
fruta y verdura, y complemente eso con el ejercicio.
Disfrute
de la vida, de la naturaleza y de las cosas sencillas. Decir "no
puedo" y "no tengo tiempo" equivale a no tener vida. Comparta
con la familia o los amigos; entréguese a la lectura, la música, los viajes o a
una buena cena. Sólo las personas que tienen la energía alta están dinámicas,
alegres, divertidas, con ganas de vivir. Las personas hurañas o frustradas
reflejan toda esa carga emocional.
6:
Déle orden a todo su entorno
Saque
el televisor de su habitación. El último pensamiento que las personas nos
llevamos al dormir es con el primero con el que nos levantamos. Si se acuesta
con la última imagen de una película de terror, se despertará alterado. Además,
eso le puede generar trastornos con el sueño. Vea televisión en la sala y
váyase a dormir con música de piano de fondo, o con un libro de su gusto.
Organice su escritorio, su vivienda y su habitación. Si llega alterado y
encuentra desorden, el estrés va a acompañarlo todo el tiempo.
REDACCIÓN
VIDA DE HOY