Cómo defenderse de los ataques
cerebrales
Cada
año se producen alrededor de seis millones de muertes por ataques cerebrales.
Después
de una trombosis, las tres primeras horas son clave para iniciar un
tratamiento. .
Fuerte
y repentino dolor de cabeza, entumecimiento o debilidad súbita en la cara, los
brazos o las piernas; confusión, problemas de visión y de motricidad son
algunas señales de alerta que anteceden a las trombosis y a los derrames
cerebrales.
Internamente,
las arterias que llevan la sangre al cerebro se tapan o se rompen y, cuando
esto se presenta, empieza a morir un área de este órgano, porque deja de
recibir el oxígeno y los nutrientes necesarios para su funcionamiento.
Su
severidad depende del sitio donde se encuentra la arteria y de la extensión del
daño. Por eso, los afectados presentan problemas de movimiento, de sensibilidad
y de comunicación, o se afecta su estado de conciencia y pueden entrar en coma
o morir.
Conozca
y prevenga
Alrededor
de 270 mil colombianos sufren accidentes cerebrovasculares
cada año. Los mensajes sobre estos males se orientan a prevenirlos o a
tratarlos de inmediato.
¿Por
qué dicen que se debe actuar rápido?
Porque
el tipo más común de ataque cerebral (la trombosis) puede ser tratado. Hoy
existen métodos para destapar las arterias obstruidas, que incluyen
medicamentos. El plazo máximo para iniciar tratamiento es de tres horas.
El
problema es que el enfermo usualmente no se da cuenta de lo que le está
pasando, porque su cerebro se afecta. A un espectador, alguien con estos
síntomas puede parecerle simplemente distraído o confundido. Esto repercute
menos en su estado de salud si alguien a su alrededor reconoce los síntomas y
actúa con rapidez.
¿Qué
secuelas dejan?
Aunque
son enfermedades del cerebro, estos ataques pueden afectar a todo el cuerpo,
causar parálisis, problemas cognitivos, de sensibilidad, de visión, del habla y
de coordinación motriz.
¿Cómo
se pueden prevenir?
Manteniendo
bajo control factores de riesgo como la hipertensión, la diabetes, los niveles
altos de colesterol y los problemas coronarios. Si fuma, tiene que dejar el
hábito.
Y
si hay derrame, ¿se puede actuar a tiempo?
Dependiendo
del sitio del sangrado es posible drenar con cirugía. Incluso, en los casos de
aneurismas rotos (debilidad arterial), puede evitarse que vuelvan a sangrar. Como
la sangre ocupa espacio, se puede actuar para que no aumente la presión en las
células del cerebro y las mate.
¿Y
después del ataque?
Hay
que empezar un programa de rehabilitación integral, orientado
a mejorar la movilidad, la sensibilidad y los patrones de comunicación y que se
reintegre a sus actividades normales.
¿Quién
se encarga de eso?
Un
equipo interdisciplinario debe intervenir desde que la persona se hospitaliza y
fijar metas específicas en el movimiento, en lo funcional, en el lenguaje y en lo
cognitivo, con base en el diagnóstico y en el pronóstico médico.
Síntomas
que exigen correr a urgencias
Pérdida
súbita del conocimiento, de la fuerza y de la sensibilidad.
Convulsiones
de cualquier tipo.
Alteraciones
del lenguaje: confusión, incoherencia y dificultad para entender.
Problemas
del habla: dificultades para articular las palabras (habla
pastosa).
Alteraciones
del equilibrio: si la persona sufre pérdida de fuerza en una parte del
cuerpo.
Pérdida
de la visión o de cualquier otro sentido, como la audición o el
olfato.
Pérdida
del control de los esfínteres.
FUENTE:
ASOC. COLOMBIANA DE NEUROLOGÍA.