Cuando el diagnóstico dice:
cáncer
Un
diagnóstico de cáncer suele ser una noticia demoledora. Sentimientos como el
miedo, la incertidumbre y la tristeza tienden a apoderarse de aquellos
pacientes que la reciben. Frente a los exámenes médicos que dan cuenta de la
enfermedad, la palabra futuro parece desmonoronarse.
No
obstante, la palabra cáncer no es necesariamente sinónimo de muerte. Cada vez
son más los casos que se diagnostican de manera temprana, lo que incrementa las
posibilidades de una cura. Asimismo, el abanico de tratamientos es cada vez más
amplio, y sus efectos secundarios, en algunos casos, menos severos.
Con motivo del Día Mundial del Cáncer, celebrado el 4 de febrero, especialistas
en oncología consultados por El PAIS ofrecen nueve consejos para enfrentar este
diagnóstico y el proceso que viene a continuación.
1. Acepte el diagnóstico
La
primera reacción ante la noticia de un cáncer es la de negación. Si bien eso es
normal durante una o dos semanas, luego es necesario que el paciente acepte el
diagnóstico para poder iniciar el tratamiento más adecuado. No luche contra esa
realidad, asúmala.
2. Hable claro con su médico
Una
buena relación médico-paciente es fundamental en este proceso. No tema hacer
preguntas y pida información sobre la enfermedad como: el tipo de cáncer, su
ubicación, qué tan avanzado está, las posibilidades de cura, los tratamientos
disponibles y sus efectos secundarios.
3. Déjese ayudar
La
familia y los amigos cercanos suelen ser un gran apoyo durante la enfermedad.
Permita que le ayuden en tareas sencillas como llevar los niños al colegio,
hacer las compras en el supermercado o preparar alguna comida por usted. Ellos
también se sentirán útiles.
4. Busque redes de apoyo
Conformados
por otros pacientes con el mismo diagnóstico, en los grupos de apoyo se puede
intercambiar información sobre tratamientos o sobre cómo lidiar con los efectos
secundarios. Además, le harán sentir que usted no está solo en esta lucha.
5.No se
culpe
No
piense que el cáncer que padece se debe a algo que hizo o dejó de hacer, o al
entorno en el que vive. Libérese de la angustia que le genera la culpa y
concéntrese en su tratamiento y en estar rodeado de seres queridos y de
aquellos en quienes confía.
6. Anticípese a los cambios
La quimio y la radioterapia suelen traer molestos efectos
secundarios, entre ellos el deterioro del cuerpo y la caída del pelo. Decida,
por ejemplo, si quiere llevar una peluca, una pañoleta o simplemente no ocultar
su enfermedad. Pregunte por maquillajes especiales que lo ayudarán a lucir un
mejor semblante.
7. Viva sanamente
Una
sana alimentación que incluya muchas frutas, verduras y carnes blancas, ayuda
en estos momentos en que el cuerpo está saturado por la cantidad de
medicamentos que está recibiendo. Caminatas al aire libre y la práctica del
yoga son un muy buen complemento.
8. Revise sus metas
Un
diagnóstico de cáncer suele llevar a los pacientes a replantear sus vidas.
Pregúntese cuáles son sus prioridades y dedique más tiempo a aquellas
actividades que realmente disfruta. Puede ser un buen momento para estrechar
relaciones con los seres queridos.
9. Busque la espiritualidad
La
meditación y la oración son alternativas válidas en los procesos de enfermedad
y curación. Éstas ayudan a estabilizar a las personas y a controlar sus niveles
de ansiedad. Según el doctor Javier Gutiérrez, “algunos pacientes renacen con
esta enfermedad, empiezan a ver la vida de una forma positiva y espiritual”.