Polémica por la llamada Clínica de la Mujer en Medellín

La Clínica de la Mujer será construída en el norte de la ciudad, en un terreno de 4 mil metros cuadrados. Este es el diseño ganador.

La controversia la genera la posibilidad de realizar procedimientos como las Interrupciones Voluntarias del Embarazo (IVE) despenalizadas por la Corte Constitucional.

La Secretaria de Salud de Medellín, Luz Marina Agudelo, asegura que hace un par de meses cuando presentó a los medios el proyecto de la Clínica de la Mujer no se imaginaba que esta fuera a suscitar la polémica alrededor del tema del aborto que hoy se está viendo en la ciudad.

En ese entonces el centro hospitalario, que se construirá  en el norte de la capital paisa, en un lote de 4 mil metros cuadrados y que costará alrededor de ocho millones de dólares, fue mostrado por la Administración como un esfuerzo para mejorar las condiciones de salud de las mujeres, específicamente en problemas de ese grupo poblacional, como el cáncer de cérvix, la osteoporosis y hasta los traumas psicológicos derivados del conflicto armado.

Sin embargo, pocos días después de la presentación de la iniciativa empezaron a levantarse las voces de algunos grupos de ciudadanos y de medios de comunicación regionales cuestionando la idoneidad de una clínica estatal para realizar otro tipo de procedimientos, como las Interrupciones Voluntarias del Embarazo (IVE) despenalizadas por la Corte Constitucional.

"Creemos que es un despropósito que una clínica estatal anuncie que va a realizar IVE, pues eso se convierte en una promoción del aborto, que es un delito así esté despenalizado y del asesinato de un bebé que es lo que implica ese procedimiento", le dijo a EL TIEMPO Carlos Santiago Cano un terapeuta familiar que lidera uno de los grupos que aseguran que la Clínica necesita de un replanteamiento.

"Un proyecto político que promulga la igualdad como el que gobierna a Medellín no es coherente con el hecho de promocionar la discriminación de los bebés y su derecho a vivir, según las circunstancias en las que fueron concebidos o de su desarrollo", agregó Cano refiriéndose a los casos especiales en los cuales las mujeres pueden acceder a una IVE: violación, malformación del feto o peligro para la vida de la madre.

Luz Marina Agudelo, secretaria de Salud de la ciudad defiende el proyecto, que será una realidad en 2010 y replica que ese centro de salud prestará el servicio de de IVE porque esa es su obligación legal pero que su concepción y su plan de acción van mucho más allá de eso.

"Tenemos tres líneas de acción: salud sexual y reproductiva, salud mental y violencia de género. Por eso es muy triste que la polémica y la atención sobre este proyecto tan importante para la ciudad y que va en beneficio directo del 54 por ciento de su población solo se haya abordado desde el punto de vista de las IVE, que no son el eje de su funcionamiento", señala la funcionaria.

Por su parte, el jefe del Departamento de Obstetricia y Ginecología de la Facultad de Medicina de la Universidad de Antioquia, Juan Guillermo Londoño, defendió a cabalidad el proyecto y aseguró que incluso desde el punto de vista de las IVE, el hecho de que haya otra clínica en la ciudad realizando esos procedimientos es destacable.

"Quienes por 25 años hemos visto las consecuencias del aborto inseguro le pedimos a quienes critican la Clínica respeto por los derechos de las mujeres, conseguidos tras años de luchas y refrendados por la Corte Consitucional", argumentó Londoño.

Sin embargo, Humanidad Nueva, otro grupo de ciudadanos liderados por el comunicador social Vicente Guerra, asegura que el problema no es tanto el hecho de que se practiquen IVE legales sino que no se le ofrezca a las mujeres alternativas a ese procedimiento.

"¿Si una mujer fue violada, su hijo en gestación tiene una malformación o su vida está en peligro y aún así decide seguir con el embarazo hay alguna alternativa para ella en esa Clínica?", se pregunta Guerra,"sí no la hay es preocupante y si la hay, deberían comunicarla mejor para que las mujeres de la ciudad sepan que tienen esa opcíon", agrega.

En eso coincide con el personero de Medellín, Jairo Herrán Vargas, quien también reconoce que no hay un programa específico para quienes tomen ese tipo de decisiones. "Si una mujer decide tener su hijo a pesar de una malformación debe cobijarse en el amparo médico común y corriente pero no conocemos ningún programa específico diseñado para ella", aclaró.

Sin embargo, aseguró que esa no es excusa para atacar el proyecto. "Se está focalizando erradamente y estigmatizando absurdamente, es una Clínica para la salud de la mujer
y no para abortos, eso no tendría sentido hacerlo" puntualizó.

Por lo pronto hoy se presenta el diseño ganador para el edificio de la Clínica de la Mujer y aunque la polémica aún no mengua, en la Administración aseguran que su concepción no tiene reversa pues es la piedra angular del Plan de Desarrollo en materia de salud.

Juan Diego Urrea U.
MEDELLÍN