Entrevista Con Carlos Ronderos, De La U. Sergio Arboleda La Ciudad Y Sus Jóvenes, A
Merced Del Cigarrillo
El tabaquismo en Bogotá se convirtió en una epidemia. Hoy, la ciudad tiene
1,2 millones de fumadores y se estima que la mitad son
población universitaria y joven.
Por eso arrancó una campaña que une al Distrito y a la Academia para reversar
esta tendencia en los próximos dos años y que va encaminada, particularmente, a
hacer cumplir la existencia de espacios libres de humo en Bogotá.
Carlos Ronderos, profesor investigador de la Escuela de Empresas de la Universidad Sergio
Arboleda, que lidera esta iniciativa, le explica a EL TIEMPO las estrategias.
¿Qué pasa en Bogotá con los espacios libres de humo? La Ley 1335 de 2009 prohíbe el
consumo de tabaco en las áreas cerradas de lugares de trabajo y de sitios
públicos. Aunque al comienzo Bogotá fue ejemplar en el cumplimiento de la
norma, con el tiempo esto se ha ido relajando y la línea de dónde está
prohibido comenzó a correrse. Están acomodando la Ley y cada quien le da su
interpretación. En sitios nocturnos a donde van los muchachos, por ejemplo,
ésta no se cumple.
¿Qué se puede hacer al respecto? El incumplimiento de la Ley nos llevó a plantearle a la Iniciativa Bloomberg,
del alcalde Bloomberg, un millonario que ha dedicado
parte de su fortuna a la lucha contra el tabaquismo, un programa para afianzar
los espacios libres de humo en la ciudad y atacar la epidemia de tabaquismo en
la población joven. El trabajo está encaminado a capacitar a agentes de Policía
para que conozcan las normas, a concientizar a niños
de colegios distritales, a fortalecer la parte
jurídica para hacer cumplir la Ley
y analizar el tema de los impuestos al tabaco, pues estos han ido bajando y, si
el cigarrillo es más barato, se fuma más y el costo es salud es mucho mayor.
¿Cuál es ese costo? Con un grupo de Canadá y Uruguay estamos analizando el
costo de atender la enfermedad de los fumadores, el cual es mucho mayor que el
recaudo. Este estudio está por hacerse. Como el tabaquismo no estaba previsto
como una epidemia no se sabe su costo.
¿Qué pasa en Bogotá? Los precios del cigarrillo han ido bajando y hoy
encontramos que, a diferencia de hace 10 años, es más barata una cajetilla de
cigarrillos que un kilo de arroz. El precio del cigarrillo respecto de otros
bienes de consumo básico se está abaratando. Bogotá, además, tiene los precios
más bajos de cigarrillo en comparación con otras ciudades latinoamericanas
(véase gráfico).
Ustedes hicieron un estudio para detectar nicotina en el ambiente...
En una reunión en Ginebra, la Organización Panamericana
de la Salud –OPS– me contó de un programa que estaban adelantando para
medir, por primera vez, la contaminación ambiental por nicotina, pues siempre se
mide el humo.
Nosotros lo que queremos probar con cifras es que en los ambientes donde hay
humo hay nicotina en el aire y que esta tiene efecto en los fumadores pasivos,
sobre todo en la salud de empleados que trabajan en sitios como bares y
restaurantes y les toca inhalar nicotina todo el día.
En conjunto con la
Secretaría de Salud medimos, por medio de 120 filtros
especiales, equipos sofisticados que los prestan de país en país, los niveles
de nicotina en un hospital, dos colegios distritales,
la Alcaldía,
siete restaurantes, tres bares y el Aeropuerto. En estos lugares, además,
encuestamos a 150 personas para indagar qué tipo de síntomas han presentado.
¿Qué sanciones poner a quienes violen la Ley? Le enseñaremos a la Policía qué sanciones
puede cumplir y hasta dónde. Por eso, la capacitación, que estimamos durará
tres meses. Ya estamos diseñando los contenidos. En cuanto a las sanciones, el
Código Distrital de Policía contempla herramientas
para actuar en este caso, como sellamientos y multas,
pero no se está haciendo.
¿Cuánto vale esta campaña? El proyecto es auspiciado por la Iniciativa Mundial
Bloomberg a través de la Unión Internacional
contra la Tuberculosis
y las Enfermedades Respiratorias, que será la encargada de administrar los
fondos que da Bloomberg. Estamos hablando de una
campaña que en dos años vale alrededor 1 millón de dólares. Ellos ponen 300.000
dólares. Las otras partidas las aportan la Universidad Sergio
Arboleda y el Distrito.
¿En qué porcentaje buscan bajar las cifras de consumo de cigarrillo? No
podemos decir: lo vamos a bajar a tanto. Lo que tenemos previsto es una
evaluación permanente sobre el impacto. Bloomberg lo
que más exige es evaluación de resultados.