Cien científicos luchan contra el anopheles, trasmisor de la malaria

Científicos de Colombia, Perú, Guatemala y Panamá se unieron para luchar, durante los próximos siete años, contra la malaria, enfermedad que afecta a 300 millones de personas en el mundo.

En el Centro de Investigación Científica Caucaseco, de Cali, bajo la dirección del médico Sócrates Herrera, quien ha dedicado los últimos 25 años al estudio de la malaria, estará la sede y la coordinación del Centro Latinoamericano para la Investigación y Control de la Malaria (Claim), reconocido por el Instituto Nacional de la Salud de Estados Unidos como uno de los 10 centros internacionales de excelencia para la investigación de la malaria.

Estados Unidos destinó para los estos 10 centros 100 millones de dólares, al Claim le corresponderá un 15 por ciento de esos recursos.

Se trabajará en un comienzo en 21 zonas endémicas de Guatemala, Perú, Panamá y Colombia. En el caso colombiano se estudiarán Tumaco, el Valle y Córdoba. Después, en una segunda fase, se incorporará a Ecuador, Honduras, Haití y República Dominicana.

"En los últimos 50 años hemos utilizado medidas de control: Insecticidas, medicamentos que a veces funcionan y otras veces no. Ahora se trata de ver por qué en algunas circunstancias y en algunas áreas todas esas medidas fallan y cómo podemos mejorarlas. Como Centro de Investigación seguimos con la vacuna, todo orientado a que los instrumentos y las estrategias que tenemos contra la malaria se puedan usar ahora de manera más efectiva y más eficiente", dijo el médico Herrera, quien lidera el Claim.

"En Guatemala hemos logrado una buena caracterización de algunos patrones de transmisión; hemos evaluado medidas de control, adaptándolas y mejorándolas para el contexto guatemalteco", señaló la científica Norma Padilla, del Centro de Estudios en Salud, Universidad del Valle de Guatemala.

"En Perú hemos hecho esfuerzos enormes pero, el mosquito siempre nos gana la partida. Por eso la importancia de unirnos para trabajar en su erradicación. En el país tenemos tres millones de personas afectadas", dijo la científica peruana Miryam Palomino.

El enigma

Una de las tareas del Centro será entender el comportamiento del anopheles, mosquito transmisor que, pese a décadas de investigación, todavía es un enigma. En el caso de Colombia, de 40 especies, solo se han identificado unas pocas transmisoras.

Cómo se desarrollan las defensas será otro de los objetivos porque tampoco es claro para los científicos por qué algunas personas pueden vivir con el parásito adentro, mientras otras mueren.

Un mosquito infectado transporta en su saliva el parásito. Una vez introducido en el organismo, dos semanas después, sale a la circulación sanguínea. A los 15 días se tendrán ya 30.000 parásitos. Estos parásitos se multiplican de manera exponencial y si no se controla la persona muere.

En las zonas tropicales se registran 500 millones de casos cada año, implica 10 veces la población colombiana. Tres millones mueren, especialmente niños y mujeres embarazadas.

"Erradicarla es un reto monumental. Sí se puede eliminar. En el Valle Geográfico del río Cauca, el Magdalena medio, el sur de Estados Unidos, los países del sur de Europa tuvieron malaria, hoy la enfermedad no existe. En Cali no hay malaria. Si no logramos erradicarla, de todas formas, tendremos un impacto importante en la región", dijo el médico Sócrates.

"Hemos aglutinado a los mejores científicos y a los mejores centros para acabar con la malaria", dijo Tonu Wali, del Instituto Nacional de Salud de Estados Unidos, quien estuvo en Cali durante la presentación del Claim.

Hace un año el Instituto lanzó la convocatoria para financiar a los mejores centros que lucharán contra la malaria y el centro de Investigación Científica de Caucaseco respondió con una propuesta de 500 páginas y las hojas de vida de 100 científicos latinoamericanos.