Chaleco “inteligente” envía mensajes
sobre ritmo cardíaco
Nov.
10 de 2012
Por:Ana
María Escobar Jiménez, Unimedios
Una prenda de vestir que monitorea el estado cardíaco de
un paciente las 24 horas del día y envía señales de alarma sobre su actividad
motora, vía correo electrónico o celular, fue desarrollada por ingenieros de la
UN. La innovación beneficiará principalmente a personas enfermas y adultos
mayores.
Pedro
era un abuelo rebosante de salud, un “roble” criado en el campo, pero un
accidente cerebrovascular le restó movilidad a su
cuerpo y tranquilidad a su familia.
Él no se conforma con postrarse en una cama. Su carácter enérgico lo impulsa a
estar activo todo el día y a superar la crisis lo antes posible; algo que se
convierte en un problema para sus seres queridos, que temen que se caiga cuando
esté solo.
Esa angustia pronto será cosa del pasado, gracias a un avance científico y
tecnológico desarrollado por Gloria Patricia Cardona y Francisco Martínez Tabares, dos jóvenes investigadores de la Universidad
Nacional de Colombia en Manizales que unieron sus disciplinas –ella es
ingeniera química y él, ingeniero físico– para
provecho de la medicina.
Se trata del Electrodoctor: un chaleco “inteligente”
que tiene integrado un sistema de monitoreo médico que, en tiempo real y sin
importar la distancia, envía mensajes al correo electrónico o al celular del
médico o acudiente del paciente. Su información detalla el comportamiento de
las señales corporales de la persona (como ritmo cardíaco, frecuencia
respiratoria o movimientos anormales, entre otras).
Según Cardona, esta innovadora prenda de vestir facilita la atención oportuna
de personas enfermas, de la tercera edad o, incluso, de aquellas sanas que
pueden sufrir un accidente o un ataque por robo.
Es, además, una herramienta útil para monitorear las afecciones del corazón,
cada vez más comunes entre la población juvenil e infantil, según la
Organización Mundial de la Salud.
La tecnología es vital para prevenir la muerte súbita de neonatos, primera
causa de su mortalidad en países occidentales. Además, permite detectar en
etapas tempranas patologías neurodegenerativas como alzhéimer o párkinson, así como
hacer el seguimiento y evaluación permanente a estas enfermedades.
Monitoreo remoto
El Electrodoctor es un chaleco fabricado en un
material elástico, adaptable a cualquier contextura y se puede usar como ropa
interior. Los circuitos que leen las señales del cuerpo no exceden los cinco
centímetros de diámetro, por lo cual pasan inadvertidos.
El componente medico es avalado por instituciones como la Fundación
Cardiovascular, mientras que el aspecto técnico se desarrolla en conjunto con
el grupo de Procesamiento y Reconocimiento de Señales de la UN en Manizales.
Martínez Tabares, quien trabaja en este proyecto como
parte de su tesis de Doctorado en Ingeniería (línea de Automática), asegura que
la adquisición de las señales electrocardiográficas se hace a través de una red
de sensores de área personal. Consiste en un conjunto de circuitos que se
comunican entre sí, ubicados a los lados del tórax y en la parte inferior del
abdomen, en donde se perciben mejor los pulsos eléctricos del corazón.
Interferencia mínima
Para eso, utiliza un proceso de adquisición multicanal
de señales y de procesamiento multimodal (es decir,
de distintos tipos): electrocardiograma, presión, temperatura, aceleración y
frecuencia respiratoria. A la vez, registra y mide diferentes puntos de la misma
señal. Luego, mediante un algoritmo basado en correlación –técnica que compara
diferentes señales e identifica sus similitudes o variaciones–,
detecta cuando estas salen del rango normal.
Esta técnica tiene una ventaja extra: permite minimizar las interferencias
ocasionadas por el acto de caminar o por el desprendimiento de electrodos (los
conductores eléctricos que lleva la señal del cuerpo al sistema) o por campos
electromagnéticos del fluido eléctrico circundante. Así, mejora la efectividad
de la toma de señales en movimiento.
La información es transmitida inalámbricamente a un
teléfono móvil y, desde allí, al servidor de internet
de los investigadores, el cual analiza los datos y envía constantemente el
diagnóstico vía correo electrónico o mensaje de texto.
Para detectar la actividad motora, hay sensores que miden la aceleración del
movimiento. De este modo, cuando la persona tiene un desplazamiento
brusco o por fuera de los parámetros normales, el sistema emite de inmediato
una alerta al celular o al computador.
“El sistema es útil en zonas lejanas, donde hay poca cobertura médica. Además,
es tan fácil de usar que él mismo le indica al paciente como ajustarse los
electrodos si alguno se desconecta”, manifiesta el ingeniero Martínez Tabares.
Las pruebas de este prototipo, que se encuentra en etapa de patente, se han
efectuado en una institución promotora de salud de la ciudad. Gracias a este
proceso, los investigadores ganaron la convocatoria 523 de creación de unidades
de negocios de Colciencias y contaron con el apoyo
del Parque de Innovación Empresarial de la UN.