Los vendedores quieren ir hoy a la fija con el consumidor. Por eso ya no
sólo quieren entrar en su casa, su oficina, el sitio donde hacen deporte y
hasta “abrir” su billetera, con la publicidad de sus marcas, sino que ahora
quieren examinarles el cerebro.
Quieren saber qué es lo que realmente hace que una persona entregue su
dinero por cierta marca o producto. Desean conocer qué está pensando en
realidad el consumidor, qué es lo que lo motiva a comprar. En pocas palabras,
quieren ver a qué responden emocionalmente, qué es lo que hay en el
subconsciente que los lleva a comprar.
Y eso ya lo están midiendo hoy en Colombia. Desde hace 6 meses llegó la
empresa líder en neuromarketing en el mundo, Neurofocus, a la que ya acuden cerca de 20 compañías que
operan en el país.
Qué mide el método .
Firmas productoras de papas fritas, gaseosas, lácteos, del sector de la
banca y hasta empresas de televisión ya aplican el método para asegurarse no
sólo el éxito de los productos que ofrecen, sino el incremento en sus ventas.
A través de equipos que permiten examinar la actividad cerebral cada 2.000
veces por segundo (electroencefalografía), determinan detalladamente a qué
punto está realmente enfocado el ojo (eye traking) y miden respuestas fisiológicas a ciertos
estímulos (respuesta galvánica), para, finalmente, conocer la efectividad de la
publicidad, de los productos, de las marcas, de los empaques y la experiencia
en punto de venta.
“Examinamos si lo que se le está presentando a una persona capta su
atención, qué tanto el gusta o no, o qué le gustó y qué no de un producto o
campaña publicitaria, y si lo va a recordar o no”, señala Felipe Jaramillo,
representante en Colombia de Neurofocus, empresa que
nació hace siete años en California, de la mano de expertos en neurociencia,
incluidos premios Nóbel, y mercadeo de universidades como Berkeley
y Harvard. Y agrega: “En un producto podemos medir,
con los equipos, qué siente una persona en el instante en que el actor del
comercial se lleva una papa frita con una salsa a la boca, o ver si el empaque
lo identifica en la góndola, o nos dice cómo una empresa debe exhibir sus
productos en los puntos de venta”