Para evitar que le ‘atribuyan’ hijos ajenos o futuras reclamaciones de
supuestos herederos, Ernesto decidió sacar su cédula genética, un documento que
incluye los 13 marcadores genéticos que establecen su identidad y contienen
información que lo hacen único e irrepetible.
Este ‘perfil genético’, que se traslada a datos numéricos en un carné portable, es similar a una carta dental o a una huella
dactilar y le sirve, por ejemplo, para ser identificado en caso de siniestro,
desaparición, suplantación o para establecer la paternidad de hijos que le
resulten en vida o después de muerto.
Todos los seres humanos tienen los mismos marcadores y lo que los hace
diferentes es que el número de repeticiones de un marcador varía de una persona
a otra.
Estos 13 marcadores o fragmentos pequeños de ADN ya fueron estandarizados y
validados a nivel internacional para ser usados en identificación, exclusivamente.
“Yo viajo regularmente en avión y, en caso de un accidente, eso facilitaría
mi identificación. Me da tranquilidad tener este documento”, afirma Ernesto, de
43 años, casado y padre de dos hijos.
“Es un mecanismo de identificación adicional al registro civil, la tarjeta
de identidad y la cédula de ciudadanía. La tecnología permite tener este
documento genético que es vitalicio, fiable y con información que no cambia con
el tiempo”, afirma Cielo Rocío Pineda, directora del laboratorio de identificación
humana de
Desde 2007, cuando arrancó este programa,
“El 20 por ciento la saca porque viaja con frecuencia y es una forma de
identificación adicional. El 80 por ciento para establecer filiación...
esperábamos que lo hicieran más en caso de
siniestros”, agrega Pineda.
Este perfil se guarda en una base de datos, a la cual sólo accede el dueño
de la muestra o la persona que éste autorice, con un código de seguridad.
Algunas embajadas lo han utilizado en los últimos años para hacer
identificación fidedigna en casos de agrupamiento familiar en el exterior.
80 cédulas genéticas han sido tramitadas este año por
EN SOLO TRES DÍAS SE OBTIENE ESTE PERFIL.
En tres días la persona puede acceder a su cédula genética, que tiene un
costo de $200.000 e incluye el carné y el perfil genético.
El proceso es simple:
Algunos países de Europa piden el perfil genético, que se traduce en un
código numérico, mas de forma preventiva que obligatoria.
"En Estados Unidos ya existe la identificación humana a partir de la
huella genética y se hace para quienes tienen riesgo de muerte (…) los
militares y personas del Gobierno tienen guardada una muestra de sangre”,
afirma la genetista Clara Inés Esteban