Cali le apunta a reducir el abuso de las drogas

Sensibilización. Durante el evento, en la Plaza de San Francisco, jóvenes de la Fundación La Luz gritaron a una sola voz su deseo de recuperarse.
Bernardo Peña

El alcohol desde temprana edad, la puerta de entrada para otras adicciones.

Ayer el mundo entero celebró el Día Internacional de lucha contra el uso indebido y tráfico ilícito de drogas. Y aunque el Valle del Cauca no hace parte de las regiones del país con mayor consumo de este tipo de sustancias, desde Cali se fortalecen estrategias para mitigar y prevenir la dependencia psicoactiva, en ascenso entre los jóvenes caleños.

Para celebrarlo, la Secretaría de Gobierno del Departamento dispuso un espacio en la Plazoleta de San Francisco donde cerca de 30 organizaciones que trabajan en la prevención y atención de la drogadicción, orientaron a la comunidad.

Y es que el reciente Estudio Nacional de Consumo de Sustancias Psicoactivas en Hogares evidenció que alrededor de 540.000 jóvenes colombianos que no superan los 25 años de edad fuman marihuana, una de las drogas ilícitas más consumidas en Colombia.

Lizzet Cerón, con 13 años de edad, puede dar fe de esto. Desde enero su ex novio la incitó en el consumo de marihuana, cocaína, pegante y ‘pepas’, pero hoy está contenta porque ya lleva un mes en la Fundación La Luz.

“Mis padres no sabían nada al comienzo, pero luego se enteraron y me ayudaron, aunque todavía me falta mucho para superarme”, dijo la joven, quien compartió su experiencia en el evento.

De otro lado, las autoridades de salud Municipal y Departamental coinciden en la necesidad de intensificar campañas contra el consumo irresponsable de las sustancias legales, que resultan igual de nocivas que las ilícitas.

El estudio también reveló que el 86% de los encuestados consumieron licor alguna vez en su vida. Cerca de la mitad de esta población encuestada es menor de edad.

Y aunque, en comparación de Antioquia el occidente colombiano no es la región con mayor prevalencia de uso de alcohol, el 10,8% de su consumo corresponde a Cali, por ser el municipio con más índice poblacional.

Frente a esta realidad, la coordinadora del programa de Salud Mental de la Secretaría de Salud de Cali, Maritza Isaza, explicó que “la puerta de entrada a cualquier otra sustancia, es el alcohol. Por eso es importante educar en el consumo responsable, en una ciudad caracterizada por una vida nocturna muy amplia”.

Quizás por eso José Darío Vélez, “hasta hace poco”, dejó de ser un drogadicto. “A los cinco años mi padre me decía que el trago era para los machos y yo le obedecía porque quería ser su reflejo”. Y así empezó. Primero con alcohol y luego con marihuana, cocaína y otras sustancias más.

Pero “el adicto lo seguirá siendo toda la vida. Es un enfermo y como tal debe ser asistido por el sistema de salud. Puede dejar de consumir y volverse socialmente apto, pero al probar una sustancia, volverá a caer con toda seguridad”, sostuvo Henry Valencia, coordinador de la Unidad de Salud Mental del HUV.

Por eso, “lo que buscamos es que se visibilice el tema de estas sustancias, porque nosotros vamos por un lado haciendo prevención, pero siguen existiendo eventos deportivos que usan su patrocinio”, aseveró María Fernanda Ortiz, coordinadora del Servicio de Tratamiento de la Corporación Caminos.

·  Desde el 2006 la Secretaría de Salud de Cali lidera la campaña “me voy de rumba, pero no me derrumbo”, a favor del uso responsable del licor.

Para tener en cuenta

En la Línea Amiga de la Secretaría de Salud Municipal: 5141900, recibirá orientación de cualquier tema asociado con sustancias psicoactivas.

El informe citado lo lideraron los ministerios del Interior y de Justicia, de Protección Social y la Dirección Nacional de Estupefacientes. Se realizó con casi 20 millones de colombianos, entre los 12 y 65 años de edad.