Calidad educativa: más que
pruebas
Expertos
de todo el país discutieron sobre el reto de evaluar la calidad de la
educación, más allá de las pruebas y los resultados.
Lograr
convergencia entre pruebas que miden el conocimiento, como las del Icfes, y factores asociados a la educación, como el clima
escolar y la situación psicoafectiva de los alumnos
es la clave para medir la calidad de la educación.
Esa
fue una de las principales conclusiones del foro 'Cómo avanzar en la medición
de la calidad en educación', organizado por la Red Colombiana de Ciudades 'Cómo
vamos'* y realizado ayer, en el que se revelaron dos estudios que midieron la
calidad de la educación en matemáticas, lectura y ciencias.
El
primero evaluó el desempeño de 100.752 estudiantes de tercer grado y 95.288 de
sexto grado en 3.065 escuelas de América Latina y el Caribe.
Colombia
sobresale en porcentaje de población de 15 a 19 años que terminó estudios
primarios (91,1 por ciento), pero no sale tan bien librada en temas como que
sólo el 60 por ciento de los centros educativos tiene biblioteca.
El
segundo estudio, de tendencias en matemáticas y ciencias (TIMSS), evaluó, en el
2007, a 4.801 estudiantes de cuarto grado de 142 colegios y a 4.873 de octavo,
de 148 planteles públicos y privados.
Según
Isabel Fernandes, asesora del Instituto Colombiano
para la Educación Superior (Icfes), "los alumnos
de octavo grado tuvieron resultados superiores a los de 1995, pero el 61 por
ciento demostró conocimientos inferiores en matemáticas y ciencias. Ningún
alumno estuvo en el nivel muy superior".
Para
la experta, estas pruebas constituyen una alerta porque demuestran que, en
cuanto a contenidos, hace falta reforzar las competencias de resolución de
problemas matemáticos complejos y los procesos de comprensión de lectura
avanzada. También, se requiere formar a los estudiantes en pensamiento experto
aplicado a todos los ámbitos de la vida y la comunicación compleja en más de un
idioma.
Margarita
Peña, directora de la misma entidad, dijo, sin embargo, que no se puede
desestimar el valor de las pruebas. "Esa información nos va a servir para
funcionar en la realidad, teniendo en cuenta más indicadores de calidad y
focalizar nuestros esfuerzos. Para eso, estamos mejorando en la comunicación e
interpretación de resultados", explicó.
"La
calidad es la oportunidad de acceso y permanencia de los alumnos en el sistema
educativo en condiciones adecuadas. No sólo el logro académico es importante",
dijo Mario Colorado, secretario de Educación de Cali, donde la evaluación
incluye temas como la violencia escolar, la educación superior y la formación
docente como factores asociados a la calidad.
Para
Carlos Casas, jefe del área de Educación de la Fundación Corona, el gran reto
es "no desestimar la importancia de las pruebas, pero hacer un uso
pedagógico de las mismas" y no descuidar factores como el entorno, la
familia y la economía, y su incidencia directa en los resultados académicos de
los estudiantes".
*Una
iniciativa de la Cámara de Comercio de Bogotá, la Fundación Corona y la Casa
Editorial EL TIEMPO.