Café para combatir Alzheimer

La dosis correcta equivale a 14 tazas de té o 2 de café concentrado.

Estudio con ratones revela posible alternativa para disminuir los trastornos cognitivos. Se evaluarán los beneficios en los humanos.

Los amantes del café tienen una excusa para tomarse una taza extra, pues una dosis de cinco diarias logró que ratones con síntomas de Alzheimer recuperaran la memoria, en un experimento realizado en Florida (E.U.).

La cafeína redujo los niveles anormales de proteína beta-amiloide -uno de los principales responsables del Alzheimer- en el cerebro y en la sangre de los ratones, según científicos de la Universidad de South Florida que publicaron los resultados de su estudio en la versión digital del Journal of Alzheimer's Disease.

Según el autor principal del trabajo, el neurocientífico Gary Arendash "el hallazgo es una evidencia de que la cafeína puede ser un tratamiento viable para la enfermedad de Alzheimer y no simplemente una estrategia protectora".

Hace varios años un estudio portugués reveló que personas afectadas de Alzheimer habían consumido menos cafeína en los últimos 20 años que otras que no sufrían del mal neurodegenerativo. Desde entonces se ha indicado que un consumo moderado de cafeína puede proteger al cerebro de la pérdida de memoria durante el proceso de envejecimiento. Sin embargo, sería necesario un análisis a más largo plazo -seis meses como mínimo- para evaluar la real mejora en pacientes con Alzheimer, explicó Arendash.

Por eso, los científicos del Centro Byrd de la Universidad de Florida harán ensayos clínicos para evaluar si la cafeína ayuda a superar trastornos cognitivos leves.

Hasta el momento han sido utilizados 55 ratones alterados genéticamente para desarrollar en la vejez problemas de memoria, a la mitad de los cuales les fueron suministrados durante dos meses 1,5 miligramos de cafeína diarios -el equivalente de 500 miligramos para un ser humano-.

Según Arendash, se cree que hay mayores esperanzas de combatir el Alzheimer si se trata en una fase temprana, por lo que la cafeína debería administrarse como muy tarde en la mediana edad, entre los 40 y los 50 años de edad.

El científico dijo que no dudaría en recomendar a las personas que no sufren de hipertensión y que no estén embarazadas una dosis diaria de 500 miligramos de cafeína, preferiblemente en forma de café o pastillas. Esa dosis equivale a cinco tazas de café.

Efe