Bacterias Inmunes A Antibióticos Tienen En Guardia A Todo El Planeta

Un artículo divulgado en la última edición de la prestigiosa revista científica The Lancet tiene en guardia al mundo: un gen confiere a algunas bacterias una múltiple resistencia a la mayoría de los antibióticos conocidos.

La preocupación no está dada sólo por el hecho de que la medicina tiene pocas herramientas para combatirlas, sino porque se trata de bacterias muy comunes y de fácil transmisión, como la E-coli (Ver gráfico Duras de matar).

De acuerdo con The Lancet, los autores del estudio aislaron las bacterias en dos grandes centros en la India (uno en el sur y otro en el norte) y en un laboratorio de referencia en Londres. En este último sitio se estableció que los británicos afectados por ellas habían viajado a India o a Pakistán en el último año, o tenían vínculos con esos países.

Los investigadores concluyeron que en estas condiciones la presencia del gen en las bacterias es un potencial y grave problema de salud pública, que requiere vigilancia y atención urgente por parte de las autoridades mundiales y locales de salud.

El asunto es tan serio que la Sociedad Europea de Microbiología Clínica y Enfermedades Infecciosas (ESCMID) expidió un comunicado advirtiendo del peligro real de que las bacterias con estas características se propaguen rápidamente por ese continente.

Reportes y rumores sobre nuevos afectados empezaron a cundir. Se especula que esta pudo ser la causa de la muerte por sobreinfección de un hombre en Bélgica, que había visitado Pakistán (su país natal).

También se dijo que tres australianas que estuvieron en la India (incluida una que se sometió a una cirugía plástica en Bombay), resultaron infectadas con una bacteria de estas características.

De acuerdo con Giuseppe Cornaglia, presidente de la ESCMID, “la detección de bacterias multirresistentes ha sido para nosotros una prioridad desde que se detectó la primera de ellas en Verona (Italia) hace casi diez años”.

Cornaglia se refirió también a algunos casos en Grecia e Israel. “Esta es una amenaza para la salud pública, ya que las bacterias viajan con las personas de un país a otro (...) Es muy posible que antes de una década no existan antibióticos para tratar las nuevas infecciones, por lo que la prioridad en el momento es controlar la propagación de las infecciones”, adivirtió Cornaglia.

El problema ya desbordó lo sanitario y saltó al terreno político ayer, luego de que el Ministerio de Salud de la India rechazó el estudio de The Lancet, al que calificó de “alarmista”. También censuró el hecho de que el gen y la enzima que genera la resistencia hubieran sido bautizados con el nombre NDM-1: Nueva Delhi Metalo-betalo-lactamasa 1.

APRENDA A USAR ESTOS FÁRMACOS .

Una de las principales causas de resistencia a los antibióticos es el mal uso que la gente hace de ellos. Así que tenga en cuenta: No presione: buena parte de la prescripción excesiva de antibióticos se debe a que los pacientes les exigen a los médicos que se los receten.

No se automedique: no sirven para tratar gripas, fiebres, hinchazones ni maluqueras.

Específicos: para cada bacteria hay un antibiótico, por eso hay que tomar el que el médico diga, no el que le sugieran los demás.

Dosis y tiempos exactos: estos fármacos tienen cantidades que deben respetarse. Si el médico dice 500 miligramos, cada ocho horas, son 500 miligramos, cada ocho horas. Úselos por el tiempo exacto ordenado. No interrumpa el uso si se siente mejor.

Una batalla que las bacterias han ido ganando.

La aparición, en 1943, de la estreptomicina constituye un hito de la medicina, toda vez que, gracias a ella, se redujeron drásticamente las muertes por tuberculosis.

Esta ganancia, según advierten investigadores de todo el mundo, se ha ido perdiendo en las últimas décadas por cuenta de la aparición de cepas tuberculosas que no responden a ningún antibiótico conocido. Este problema, que fue detectado hace menos de cinco años en África, hoy afecta a más de 50 países. La enfermedad es tan severa, que la mitad de las personas que la contraen (casi todas en países pobres), fallecen.

El bacilo tuberculoso fue una de las primeras bacterias asociadas a resistencias graves. A él se han ido sumando otras, como algunos tipos de e-coli (causantes de infecciones intestinales); las klepsiellas, que causan neumonías, y algunos estreptococos.

El asunto, que es grave, ha sido advertido en otras oportunidades. En 1992 Newsweek, en una edición dedicada al tema, señaló que 13.300 pacientes internados en hospitales de Estados Unidos ese año, murieron afectados por infecciones causadas por bacterias resistentes a todos los antibióticos.

El problema se agrava si se tiene en cuenta que la industria farmacéutica ha dejado de investigar nuevos antibióticos, porque no es tan rentable como desarrollar otros fármacos.

Se fortalecen en hospitales.

Algunas de las peores bacterias han adquirido su resistencia en ambientes hospitalarios.

Estafilococo dorado: es inmune a la penicilina y se cree que produce 19 mil muertes anuales en Estados Unidos.

Seudomona aeruginosa: sobreinfecta principalmente la piel en pabellones de quemados.

Estreptococo pneumoniae: es tan resistente que sólo algunas cepas son sensibles a los fármacos.

Enterococo fecalis: si una cepa resistente sobreinfecta a pacientes durante una cirugía, el pronóstico es pésimo